50 Versículos Bíblicos para Orar por los Hijos

Versículos Bíblicos Para Orar Por Los Hijos

Introducción: En momentos de preocupación por nuestros hijos, la oración es una herramienta poderosa que nos conecta con Dios y nos brinda paz y esperanza. A continuación, encontrarás 50 versículos bíblicos que puedes utilizar como guía para orar por tus hijos. Estos versículos te ayudarán a fortalecer tu fe y a confiar en el amor y cuidado de Dios por tus seres queridos.

1. «Porque yo sé los planes que tengo para ustedes, dice el Señor, planes de bienestar y no de calamidad, para darles un futuro y una esperanza.» (Jeremías 29:11)
2. «Enséñale a tu hijo el camino correcto, y aun en su vejez no lo abandonará.» (Proverbios 22:6)
3. «Los hijos son un regalo del Señor; los frutos del vientre son una recompensa.» (Salmos 127:3)
4. «El oído que escucha las reprensiones de la vida, entre los sabios morará.» (Proverbios 15:31)
5. «Los padres rectos llevan a sus hijos por el buen camino; les dejan una herencia segura.» (Proverbios 13:22)
6. «Enséñame a hacer tu voluntad, porque tú eres mi Dios; que tu buen espíritu me guíe a tierra de rectitud.» (Salmos 143:10)
7. «El Señor es mi roca, mi amparo, mi libertador; es mi Dios, el peñasco en que me refugio. Es mi escudo, mi poderosa salvación, ¡mi alto refugio!» (Salmos 18:2)
8. «Guía al niño por el camino correcto, aunque sea difícil, y aun en su vejez no se apartará de él.» (Proverbios 22:6)
9. «Dios, escucha mi clamor; presta atención a mi oración.» (Salmos 61:1)
10. «El que ama a su hijo, lo disciplina a menudo; quien lo ama, lo disciplina a menudo.» (Proverbios 13:24)
11. «Pero Dios muestra su amor por nosotros en que, cuando todavía éramos pecadores, Cristo murió por nosotros.» (Romanos 5:8)
12. «Dios, en tus manos encomiendo mi espíritu; tú me redimiste, Señor, Dios de verdad.» (Salmos 31:5)
13. «Mis ojos están siempre en el Señor, porque él saca mis pies de la red.» (Salmos 25:15)
14. «No he dejado de dar gracias por ustedes, recordándolos en mis oraciones.» (Efesios 1:16)
15. «Aunque mi padre y mi madre me abandonen, el Señor me recogerá.» (Salmos 27:10)
16. «El Señor te bendiga y te guarde; el Señor te mire con amor y te dé paz.» (Números 6:24-26)
17. «Por tanto, también yo, habiendo oído de la fe en el Señor Jesús que hay entre vosotros y de vuestro amor para con todos los santos, no ceso de dar gracias por vosotros, haciendo memoria de vosotros en mis oraciones.» (Efesios 1:15-16)
18. «El Señor es mi pastor, nada me falta.» (Salmos 23:1)
19. «El temor del Señor es el principio de la sabiduría; todos los que practican sus mandamientos demuestran buen juicio. ¡Su alabanza permanece para siempre!» (Salmos 111:10)
20. «El hombre recto lleva una vida íntegra; sus hijos son benditos después de él.» (Proverbios 20:7)
21. «Dios mío, en ti confío; líbrame de todos mis temores.» (Salmos 34:4)
22. «Enséñame, Señor, tus caminos; guíame por sendas seguras.» (Salmos 25:4)
23. «Pero yo y mi casa serviremos al Señor.» (Josué 24:15)
24. «Porque el Señor da la sabiduría; conocimiento y ciencia brotan de sus labios.» (Proverbios 2:6)
25. «Esfuérzate y sé valiente; no temas ni te desanimes, porque el Señor tu Dios estará contigo dondequiera que vayas.» (Josué 1:9)
26. «El Señor es mi luz y mi salvación; ¿a quién temeré? El Señor es la fortaleza de mi vida; ¿de quién tendré miedo?» (Salmos 27:1)
27. «Enséñame a hacer tu voluntad, porque tú eres mi Dios; que tu buen espíritu me guíe a tierra de rectitud.» (Salmos 143:10)
28. «Confía en el Señor de todo corazón, y no en tu propia inteligencia. Reconócelo en todos tus caminos, y él allanará tus sendas.» (Proverbios 3:5-6)
29. «Toma también en cuenta la disciplina del Señor, hijo mío, y no te desanimes cuando te reprenda.» (Proverbios 3:11)
30. «Por tanto, os digo que todo lo que pidáis en oración, creed que ya lo habéis recibido, y os será concedido.» (Marcos 11:24)
31. «No se inquieten por nada; más bien, en toda ocasión, con oración y ruego, presenten sus peticiones a Dios y denle gracias.» (Filipenses 4:6)
32. «El oído que escucha las reprensiones de la vida, entre los sabios morará.» (Proverbios 15:31)
33. «El Señor es mi roca, mi amparo, mi libertador; es mi Dios, el peñasco en que me refugio. Es mi escudo, mi poderosa salvación, ¡mi alto refugio!» (Salmos 18:2)
34. «Guía al niño por el camino correcto, aunque sea difícil, y aun en su vejez no se apartará de él.» (Proverbios 22:6)
35. «Dios, escucha mi clamor; presta atención a mi oración.» (Salmos 61:1)
36. «El que ama a su hijo, lo disciplina a menudo; quien lo ama, lo disciplina a menudo.» (Proverbios 13:24)
37. «Pero Dios muestra su amor por nosotros en que, cuando todavía éramos pecadores, Cristo murió por nosotros.» (Romanos 5:8)
38. «Dios, en tus manos encomiendo mi espíritu; tú me redimiste, Señor, Dios de verdad.» (Salmos 31:5)
39. «Mis ojos están siempre en el Señor, porque él saca mis pies de la red.» (Salmos 25:15)
40. «No he dejado de dar gracias por ustedes, recordándolos en mis oraciones.» (Efesios 1:16)
41. «Aunque mi padre y mi madre me abandonen, el Señor me recogerá.» (Salmos 27:10)
42. «El Señor te bendiga y te guarde; el Señor te mire con amor y te dé paz.» (Números 6:24-26)
43. «Por tanto, también yo, habiendo oído de la fe en el Señor Jesús que hay entre vosotros y de vuestro amor para con todos los santos, no ceso de dar gracias por vosotros, haciendo memoria de vosotros en mis oraciones.» (Efesios 1:15-16)
44. «El Señor es mi pastor, nada me falta.» (Salmos 23:1)
45. «El temor del Señor es el principio de la sabiduría; todos los que practican sus mandamientos demuestran buen juicio. ¡Su alabanza permanece para siempre!» (Salmos 111:10)
46. «El hombre recto lleva una vida íntegra; sus hijos son benditos después de él.» (Proverbios 20:7)
47. «Dios mío, en ti confío; líbrame de todos mis temores.» (Salmos 34:4)
48. «Enséñame, Señor, tus caminos; guíame por sendas seguras.» (Salmos 25:4)
49. «Pero yo y mi casa serviremos al Señor.» (Josué 24:15)
50. «Porque el Señor da la sabiduría; conocimiento y ciencia brotan de sus labios.» (Proverbios 2:6)