Versículos De Enfermedad En La Biblia, también conocidos como pasajes bíblicos sobre enfermedad, son versos que ofrecen consuelo, esperanza y sanidad en momentos de enfermedad. La Biblia contiene una variedad de pasajes que hablan sobre la curación física y espiritual. Aquí hay 50 versículos de la Biblia sobre enfermedad:
1. Éxodo 15:26 – “Si escuchas atentamente la voz del Señor tu Dios y haces lo que es recto ante sus ojos, y prestas atención a sus mandamientos y guardas todos sus estatutos, no te enviaré ninguna de las enfermedades que envié a los egipcios, porque yo soy el Señor que te sana”.
2. Salmos 103:2-3 – “Bendice, alma mía, al Señor, y no olvides ninguno de sus beneficios. Él perdona todas tus iniquidades, sana todas tus dolencias”.
3. Isaías 53:4-5 – “Ciertamente llevó él nuestras enfermedades y sufrió nuestros dolores, y nosotros le tuvimos por azotado, por herido de Dios y abatido. Mas él herido fue por nuestras rebeliones, molido por nuestros pecados; el castigo de nuestra paz fue sobre él, y por su llaga fuimos nosotros curados”.
4. Mateo 10:1 – “Y llamando a sus doce discípulos, les dio autoridad sobre los espíritus inmundos, para que los expulsaran y para sanar toda enfermedad y toda dolencia”.
5. Marcos 5:34 – “Y él le dijo [a la mujer enferma]: Hija, tu fe te ha sanado; vete en paz y queda sana de tu aflicción”.
6. Lucas 10:9 – “Y sanad a los enfermos que en ella haya, y decidles: ‘El reino de Dios ha llegado a vosotros'”.
7. Juan 14:27 – “La paz os dejo, mi paz os doy; yo no os la doy como el mundo la da. No se turbe vuestro corazón, ni tenga miedo”.
8. Hechos 10:38 – “Cómo Dios ungió con el Espíritu Santo y con poder a Jesús de Nazaret, y cómo éste anduvo haciendo bienes y sanando a todos los oprimidos por el diablo, porque Dios estaba con él”.
9. Romanos 8:11 – “Y si el Espíritu de aquel que levantó de los muertos a Jesús habita en vosotros, el mismo que levantó de los muertos a Cristo Jesús también dará vida a vuestros cuerpos mortales por su Espíritu que habita en vosotros”.
10. 1 Corintios 6:19-20 – “¿O ignoráis que vuestro cuerpo es templo del Espíritu Santo, quien está en vosotros, el cual habéis recibido de Dios, y que no sois vuestros? Porque habéis sido comprados por precio; glorificad, pues, a Dios en vuestro cuerpo y en vuestro espíritu, los cuales son de Dios”.
11. 2 Corintios 4:16 – “Por tanto, no desmayamos; antes aunque este nuestro hombre exterior se va desgastando, el interior no obstante se renueva de día en día”.
12. Gálatas 5:22-23 – “Mas el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, mansedumbre, templanza; contra tales cosas no hay ley”.
13. Efesios 6:10 – “Por lo demás, hermanos míos, fortaleceos en el Señor y en el poder de su fuerza”.
14. Filipenses 4:6-7 – “Por nada estéis afanosos, sino sean conocidas vuestras peticiones delante de Dios en toda oración y ruego, con acción de gracias. Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará vuestros corazones y vuestros pensamientos en Cristo Jesús”.
15. Colosenses 3:14 – “Y sobre todas estas cosas vestíos de amor, que es el vínculo perfecto”.
16. 1 Tesalonicenses 5:23 – “Y el mismo Dios de paz os santifique por completo; y todo vuestro ser, espíritu, alma y cuerpo, sea guardado irreprensible para la venida de nuestro Señor Jesucristo”.
17. Hebreos 4:16 – “Acerquémonos, pues, confiadamente al trono de la gracia, para alcanzar misericordia y hallar gracia para el oportuno socorro”.
18. Santiago 5:14-15 – “¿Está alguno enfermo entre vosotros? Llame a los ancianos de la iglesia, y oren por él, ungiéndole con aceite en el nombre del Señor. Y la oración de fe salvará al enfermo, y el Señor lo levantará; y si hubiere cometido pecados, le serán perdonados”.
19. 1 Pedro 2:24 – “quien llevó él mismo nuestros pecados en su cuerpo sobre el madero, para que nosotros, estando muertos a los pecados, vivamos a la justicia; y por cuya herida fuisteis sanados”.
20. 2 Pedro 1:3 – “Como todas las cosas que pertenecen a la vida y a la piedad nos han sido dadas por su divino poder, mediante el conocimiento de aquel que nos llamó por su gloria y excelencia”.
21. 1 Juan 5:14 – “Y esta es la confianza que tenemos en él, que si pedimos alguna cosa conforme a su voluntad, él nos oye”.
22. Apocalipsis 21:4 – “Enjugará Dios toda lágrima de los ojos de ellos; y ya no habrá muerte, ni habrá más llanto, ni clamor, ni dolor; porque las primeras cosas pasaron”.
23. Salmo 6:2 – “Ten misericordia de mí, oh Jehová, porque estoy enfermo; sáname, oh Jehová, porque mis huesos se estremecen”.
24. Salmo 30:2 – “Jehová Dios mío, a ti clamé, y me sanaste”.
25. Salmo 41:3 – “Jehová lo sustentará sobre el lecho del dolor; menguado dejarás en su enfermedad”.
26. Salmo 91:3 – “El te librará del lazo del cazador, de la peste destructora”.
27. Salmo 103:3 – “El es quien perdona todas tus iniquidades, el que sana todas tus dolencias”.
28. Salmo 107:20 – “Envió su palabra, y los sanó, y los libró de su ruina”.
29. Salmo 147:3 – “El sana a los quebrantados de corazón, y venda sus heridas”.
30. Proverbios 4:20-22 – “Hijo mío, está atento a mis palabras; inclina tu oído a mis razones. No se aparten de tus ojos; guárdalas en medio de tu corazón. Porque son vida a los que las hallan, y medicina a todo su cuerpo”.
31. Isaías 33:24 – “Y el morador no dirá: Estoy enfermo; al pueblo que habite en ella, le será perdonada la iniquidad”.
32. Jeremías 17:14 – “Sáname, oh Jehová, y seré sano; sálvame, y seré salvo; porque tú eres mi alabanza”.
33. Ezequiel 34:16 – “Buscaré la perdida, y haré volver al redil la descarriada; vendaré la perniquebrada, y fortaleceré la débil; pero destruiré la engordada y la fuerte. Las apacentaré con justicia”.
34. Mateo 4:23 – “Y recorrió Jesús toda Galilea, enseñando en las sinagogas de ellos, predicando el evangelio del reino, y sanando toda enfermedad y toda dolencia en el pueblo”.
35. Mateo 8:16-17 – “Y cuando llegó la noche, trajeron a él muchos endemoniados; y con la palabra echó fuera a los demonios, y sanó a todos los enfermos; para que se cumpliese lo dicho por el profeta Isaías, cuando dijo: Él mismo tomó nuestras enfermedades, y llevó nuestras dolencias”.
36. Lucas 6:19 – “Y toda la gente procuraba tocarle, porque poder salía de él y sanaba a todos”.
37. Lucas 9:11 – “Pero cuando las multitudes lo supieron, le siguieron; y él los recibió, y les hablaba del reino de Dios, y sanaba a los que necesitaban ser curados”.
38. Hechos 3:16 – “Y por la fe en su nombre, a éste, que vosotros veis y conocéis, le ha confirmado su nombre; y la fe que es por él ha dado a éste esta completa sanidad en presencia de todos vosotros”.
39. Hechos 9:34 – “Y Pedro le dijo: Eneas, Jesucristo te sana; levántate y haz tu cama. Y en seguida se levantó”.
40. Hechos 14:8-10 – “Y en Listra estaban sentados cierto hombre impotente de sus pies, cojo desde el vientre de su madre, el cual nunca había andado. Este oyó hablar a Pablo, el cual, fijando en él sus ojos y viendo que tenía fe para ser sanado, dijo a gran voz: Levántate derecho sobre tus pies. Y él saltó, y anduvo”.
41. Hechos 28:8 – “Aconteció que el padre de Publio estaba en cama, enfermo de fiebre y disentería; y entró Pablo a verle, y después de haber orado, le impuso las manos, y le sanó”.
42. Santiago 5:16 – “Confesaos vuestras ofensas unos a otros, y orad unos por otros, para que seáis sanados. La oración eficaz del justo puede mucho”.
43. 1 Tesalonicenses 5:14 – “También os rogamos, hermanos, que amonestéis a los ociosos, que alentéis a los de poco ánimo, que sostengáis a los débiles, que seáis pacientes para con todos”.
44. 2 Timoteo 1:7 – “Porque no nos ha dado Dios espíritu de cobardía, sino de poder, de amor y de dominio propio”.
45. Hebreos 12:12-13 – “Por lo cual, levantad las manos caídas y las rodillas paralizadas; y haced sendas derechas para vuestros pies, para que lo cojo no se salga del camino, sino que sea sanado”.
46. Santiago 1:2-4 – “Hermanos míos, tened por sumo gozo cuando os halléis en diversas pruebas, sabiendo que la prueba de vuestra fe produce paciencia. Mas tenga la paciencia su obra completa, para que seáis perfectos y cabales, sin que os falte cosa alguna”.
47. 1 Pedro 5:7 – “Echando toda vuestra ansiedad sobre él, porque él tiene cuidado de vosotros”.
48. 2 Juan 1:2 – “Por amor de la verdad que permanece en nosotros, y estará para siempre con nosotros”.
49. Apocalipsis 22:2 – “En medio de la calle de la ciudad, y a uno y otro lado del río, estaba el árbol de la vida, que produce doce frutos, dando cada mes su fruto; y las hojas del árbol eran para la sanidad de las naciones”.
50. Apocalipsis 22:21 – “El favor del Señor Jesús sea con todos. Amén”.
Estos versículos de la Biblia sobre enfermedad nos recuerdan que Dios es nuestro sanador y que nos ofrece su paz, consuelo y sanidad. Nos invitan a confiar en Él, a buscar su presencia, a orar por sanidad y a creer en su poder de restauración tanto física como espiritual. Que estos versículos te fortalezcan y te llenen de esperanza en tiempos de enfermedad.
Versículos De Enfermedad En La Biblia te ofrecen consuelo, esperanza y sanidad en momentos de enfermedad. Encuentra aquí 50 versículos bíblicos sobre enfermedad para fortalecer tu fe y confiar en Dios como tu sanador.