Cita Bíblica: Aunque ande en valle de sombra
“Jehová es mi pastor; nada me faltará. En lugares de delicados pastos me hará descansar; junto a aguas de reposo me pastoreará. Confortará mi alma; me guiará por sendas de justicia por amor de su nombre. Aunque ande en valle de sombra de muerte, no temeré mal alguno, porque tú estarás conmigo; tu vara y tu cayado me infundirán aliento. Aderezas mesa delante de mí en presencia de mis angustiadores; unges mi cabeza con aceite; mi copa está rebosando. Ciertamente el bien y la misericordia me seguirán todos los días de mi vida, y en la casa de Jehová moraré por largos días” (Salmos 23:1-6, RV).
Queridos hermanos y hermanas en Cristo,
Hoy quiero compartir con ustedes una cita bíblica que ha sido fuente de consuelo y esperanza para muchos creyentes a lo largo de los siglos. En el Salmo 23, el rey David nos enseña acerca de la fidelidad de Dios y su presencia constante en nuestras vidas, incluso en los momentos más oscuros.
La cita bíblica “Aunque ande en valle de sombra de muerte, no temeré mal alguno, porque tú estarás conmigo” es una promesa poderosa de Dios que nos asegura su compañía y protección en medio de las dificultades y las pruebas. Aunque enfrentemos situaciones difíciles y nos sintamos rodeados de oscuridad, podemos tener la certeza de que Dios está a nuestro lado.
En este versículo, David utiliza la metáfora de un valle oscuro para representar los momentos de adversidad y peligro que enfrentamos en nuestra vida. Sin embargo, nos recuerda que no debemos temer, porque el Señor está con nosotros. Él es nuestro pastor y cuidador fiel, que nos guía y nos fortalece en medio de nuestras luchas.
Es importante destacar que esta promesa no significa que nunca pasaremos por dificultades o que no enfrentaremos situaciones dolorosas. La Biblia misma nos dice que en este mundo tendremos aflicciones. Sin embargo, lo que este pasaje nos enseña es que, a pesar de las circunstancias adversas, podemos confiar en la presencia de Dios y en su poder para sostenernos y llevarnos hacia adelante.
Cuando David declara: “tu vara y tu cayado me infundirán aliento”, nos muestra que Dios no solo está a nuestro lado, sino que también nos provee con todo lo que necesitamos para enfrentar cualquier desafío. Su vara y su cayado simbolizan su autoridad y protección. Con ellos, nos corrige, nos guía y nos da aliento para seguir adelante.
Además, David nos recuerda que Dios no solo está con nosotros en nuestras luchas, sino que también nos bendice abundantemente. Él “adereza mesa delante de mí en presencia de mis angustiadores” y “unges mi cabeza con aceite”. Esto representa la provisión y el favor que Dios derrama sobre nosotros, incluso en medio de nuestras dificultades.
Finalmente, David concluye este hermoso salmo afirmando que el bien y la misericordia de Dios nos seguirán todos los días de nuestra vida. No importa lo que enfrentemos, podemos confiar en que Dios está obrando en nuestro favor y que su amor y cuidado nos acompañarán siempre.
Queridos hermanos y hermanas, en los momentos de oscuridad y dificultad, recuerden esta poderosa promesa de Dios: “Aunque ande en valle de sombra de muerte, no temeré mal alguno, porque tú estarás conmigo”. No importa cuál sea el valle en el que nos encontremos, podemos descansar en la seguridad de la presencia y el cuidado de nuestro Buen Pastor.
Oremos: Amado Padre, gracias por tu fidelidad y por estar siempre con nosotros. Ayúdanos a confiar en tu presencia y a recordar que no importa cuál sea la oscuridad que enfrentemos, tú estás allí para guiarnos y protegernos. Que tu poder y tu amor sean nuestra fortaleza en todo momento. En el nombre de Jesús, amén.
Cita Bíblica: Aunque ande en valle de sombra de muerte.