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Promesa divina: Salmo 91:15-16, refugio en tiempos de dificultades


Salmo 91:15-16: «Me invocará, y yo le responderé; estaré con él en la angustia; lo libraré y le glorificaré. Lo saciaré de larga vida, y le mostraré mi salvación.»

Queridos hermanos y hermanas en Cristo,

Hoy quiero compartir con ustedes un pasaje bíblico que nos llena de esperanza y fortaleza en medio de las dificultades que enfrentamos en la vida. Se trata del Salmo 91:15-16, donde Dios nos asegura su presencia, protección y bendición.

En estos versículos, Dios nos promete que cuando le invoquemos, Él nos responderá. No importa cuál sea la situación por la que estemos pasando, Dios está atento a nuestras oraciones y nos escucha. Él no nos abandona en medio de la angustia, sino que está a nuestro lado, brindándonos consuelo y paz en medio de las tormentas.

Además, Dios nos asegura que nos librará de todo mal y nos glorificará. Esto significa que no importa cuán grande sea el desafío que enfrentemos, Dios tiene el poder para liberarnos de él. Él es nuestro defensor y protector, y siempre lucha a nuestro favor. Su gloria se manifiesta en nuestra vida cuando experimentamos su intervención sobrenatural y nos libera de cualquier situación adversa.

Pero eso no es todo, hermanos y hermanas. Dios también promete saciarnos de larga vida y mostrarnos su salvación. Él desea que vivamos una vida plena y abundante, llena de bendiciones y propósito. Nos concede días largos y prósperos para que podamos disfrutar de su amor y experimentar su obra en nuestras vidas. Además, nos muestra su salvación, que es la más grande bendición que podemos recibir. Por medio de Jesucristo, Dios nos ofrece la oportunidad de recibir el perdón de nuestros pecados y la vida eterna junto a Él.

Hermanos y hermanas, estas palabras son un recordatorio poderoso de que no estamos solos en este mundo. Tenemos un Dios que está dispuesto a escucharnos, protegernos y bendecirnos. Él es nuestro refugio seguro en medio de las tormentas y nuestro proveedor constante de paz y amor.

Cuando enfrentemos dificultades, recordemos invocar el nombre del Señor y confiar en Su fidelidad. Él nos responderá y nos sostendrá en la angustia. No importa cuán grande sea el desafío, debemos recordar que Dios está con nosotros y tiene el poder para liberarnos.

Asimismo, no olvidemos que Dios desea que vivamos una vida plena y abundante. Su deseo es saciarnos de larga vida y mostrarnos su salvación. A medida que caminamos con Él, experimentaremos su amor, gracia y provisión en cada área de nuestra vida.

En conclusión, hermanos y hermanas, recordemos siempre las palabras del Salmo 91:15-16: «Me invocará, y yo le responderé; estaré con él en la angustia; lo libraré y le glorificaré. Lo saciaré de larga vida, y le mostraré mi salvación.»

Que estas promesas nos inspiren a confiar en Dios en todo momento y a buscar Su presencia en cada situación. Él es nuestro refugio y fortaleza, y en Él encontraremos consuelo y esperanza. Que Su amor y fidelidad nos guíen cada día de nuestras vidas.

Amén.

Salmo 91:15-16: «Me invocará, y yo le responderé; estaré con él en la angustia; lo libraré y le glorificaré. Lo saciaré de larga vida, y le mostraré mi salvación.»