Cita Bíblica Para Un Difunto
Queridos hermanos y hermanas en Cristo,
Hoy nos reunimos en este lugar sagrado para despedir a un ser querido que ha partido de este mundo terrenal. La pérdida de un ser amado es una experiencia dolorosa y difícil de enfrentar, pero en momentos como estos, debemos recordar que la Palabra de Dios nos ofrece consuelo y esperanza.
La Biblia nos enseña que la vida es un regalo de Dios y que, eventualmente, todos enfrentaremos la realidad de la muerte. Sin embargo, como cristianos, tenemos la bendita esperanza de la vida eterna en Cristo Jesús. En momentos de duelo, encontramos consuelo en las promesas de Dios y en Su amor incondicional.
En el libro de Salmos 23:4, leemos: «Aunque ande en valle de sombra de muerte, no temeré mal alguno, porque tú estarás conmigo; tu vara y tu cayado me infundirán aliento». Estas palabras nos recuerdan que, incluso en los momentos más oscuros de nuestra vida, Dios está con nosotros. Él nos acompaña durante nuestro duelo y nos da la fortaleza para seguir adelante.
Además, en el libro de Juan 11:25-26, Jesús nos asegura: «Yo soy la resurrección y la vida; el que cree en mí, aunque esté muerto, vivirá. Y todo aquel que vive y cree en mí, no morirá eternamente». Estas palabras nos dan la esperanza de que aquellos que creen en Cristo tendrán vida eterna. Aunque nos duela la partida de nuestro ser amado, podemos confiar en que están en presencia del Señor, gozando de Su amor y paz eterna.
En momentos de duelo, también podemos encontrar consuelo en la promesa de que Dios nos dará fortaleza para sobrellevar el dolor. En Isaías 41:10 leemos: «No temas, porque yo estoy contigo; no desmayes, porque yo soy tu Dios que te fortalezco; siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia». Estas palabras nos recuerdan que Dios es nuestro refugio, nuestro sostén en tiempos de dificultad. Nos asegura que no estamos solos en nuestro dolor y que Él nos dará la fuerza necesaria para seguir adelante.
En este momento de despedida, es importante recordar que la muerte no tiene la última palabra. La muerte es solo el comienzo de una nueva vida en la presencia de Dios. Como cristianos, tenemos la esperanza de la resurrección y la vida eterna. Como leemos en 1 Corintios 15:55, «¿Dónde está, oh muerte, tu aguijón? ¿Dónde, oh sepulcro, tu victoria?». La muerte ya no tiene poder sobre nosotros, porque Cristo ha vencido la muerte y nos ha dado la victoria.
Queridos hermanos y hermanas, en medio de nuestro dolor y tristeza, recordemos siempre que Dios está con nosotros. Él nos consuela, nos fortalece y nos da esperanza en tiempos de duelo. Aunque extrañemos a nuestro ser amado, podemos confiar en que están en la presencia del Señor, disfrutando de Su amor y paz eterna.
Encomendemos a nuestro ser amado a las manos amorosas de Dios, confiando en que Él los cuidará por toda la eternidad. Recuerden que la vida en Cristo no termina con la muerte, sino que se transforma en una vida llena de gloria y gozo en la presencia de nuestro Salvador.
Que la paz del Señor, que sobrepasa todo entendimiento, sea con cada uno de ustedes en este tiempo de duelo. Que encuentren consuelo en Su Palabra y en Su amor incondicional. Y que la esperanza de la vida eterna en Cristo nos guíe y nos fortalezca en todos los días de nuestra vida.
Cita Bíblica Para Un Difunto.
En el amor de Cristo,
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