Conéctate Con Dios

El poderoso Salmo 47 Reina Valera: Alabanza y gozo en la presencia de Dios


Salmo 47 Reina Valera: ¡Alaben a Dios con gozo!

¡Saludos, hermanos y hermanas en Cristo! Hoy quiero compartir con ustedes un salmo que nos invita a alabar y adorar a nuestro amado Padre celestial. Se trata del Salmo 47 en la versión Reina Valera de la Biblia. Este salmo nos recuerda la grandeza de Dios y nos anima a celebrar con alegría su soberanía sobre todas las naciones.

El Salmo 47 comienza con un llamado a la acción: “Aplaudan, pueblos todos; aclamen a Dios con voz de júbilo” (Salmo 47:1, RV). ¿No es maravilloso que tengamos la oportunidad de alabar a nuestro Creador con gozo y gratitud? A través de la alabanza, somos capaces de expresar nuestra adoración y reconocimiento por su poder y amor inmenso.

En el versículo 2, se nos insta a entonar himnos de alabanza a Dios: “Porque Jehová el Altísimo es temible; Rey grande sobre toda la tierra” (Salmo 47:2, RV). ¡Qué hermoso es saber que nuestro Dios es el Rey sobre todo el universo! Él es digno de nuestra adoración y reverencia. Cantemos alabanzas a su nombre, reconociendo su grandeza y majestuosidad.

A medida que avanzamos en el Salmo 47, el versículo 7 nos recuerda que Dios es el soberano sobre todas las naciones: “Porque Dios es el Rey de toda la tierra; cantad con inteligencia” (Salmo 47:7, RV). Aquí se nos anima a cantar con entendimiento y sabiduría, reconociendo que Dios gobierna sobre todas las cosas. No importa cuál sea nuestra nacionalidad o idioma, todos somos llamados a reconocer y rendirnos ante su autoridad.

En el versículo 8, se nos dice que Dios reina sobre las naciones y se sienta en su santo trono: “Dios reina sobre las naciones; Dios se sienta sobre su santo trono” (Salmo 47:8, RV). Esto nos recuerda que, aunque vivimos en un mundo lleno de conflictos y divisiones, Dios tiene el control absoluto. No importa cuáles sean las circunstancias que enfrentemos, podemos confiar en que nuestro Padre celestial está en control y tiene un plan perfecto para nuestras vidas.

Al llegar al final del Salmo 47, el versículo 9 nos insta nuevamente a alabar a Dios: “Los príncipes de los pueblos se reunieron como pueblo del Dios de Abraham; porque de Dios son los escudos de la tierra; él es muy exaltado” (Salmo 47:9, RV). Este verso nos recuerda que incluso aquellos en posiciones de poder y autoridad deben postrarse ante el poder y la grandeza de Dios. Él es el escudo y protector de toda la tierra, y merece ser exaltado y adorado.

Hermanos y hermanas, hoy les animo a reflexionar sobre el Salmo 47 y a aplicarlo en nuestras vidas. Que nuestras voces se unan en alabanza y adoración a nuestro Dios, reconociendo su grandeza y soberanía. No importa cuáles sean las circunstancias que enfrentemos, podemos confiar en que Dios está en control y merece toda nuestra alabanza.

¡Alaben a Dios con gozo, pueblos todos! ¡Aclamen a Dios con voz de júbilo! Él es el Rey de toda la tierra, digno de toda nuestra adoración. Que este salmo nos inspire a vivir vidas que reflejen la gloria de nuestro amado Padre celestial.

Salmo 47 Reina Valera

¡Alaben a Dios con gozo!
Aplaudan, pueblos todos;
aclamen a Dios con voz de júbilo.
Porque Jehová el Altísimo es temible;
Rey grande sobre toda la tierra.
El nos someterá pueblos,
Y naciones bajo nuestros pies.
El nos elegirá nuestras heredades;
La hermosura de Jacob, al cual amó. Selah
Dios ha subido con júbilo,
Jehová con sonido de trompeta.
Cantad a Dios, cantad;
Cantad a nuestro Rey, cantad;
Porque Dios es el Rey de toda la tierra;
Cantad con inteligencia.
Reinó Dios sobre las naciones;
Se sentó Dios sobre su santo trono.
Los príncipes de los pueblos se reunieron
Como pueblo del Dios de Abraham;
Porque de Dios son los escudos de la tierra;
El es muy exaltado.