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Salmo 37:3: Deléitate en el Señor y cumple tus deseos


Salmo 37:3 – «Confía en Jehová, y haz el bien; habita en la tierra, y pastorea la verdad.»

Queridos hermanos y hermanas en Cristo,

Hoy quiero compartir con ustedes una poderosa promesa que se encuentra en el Salmo 37:3. En medio de los desafíos y las dificultades que enfrentamos en nuestra vida diaria, este versículo nos brinda una guía clara y reconfortante sobre cómo vivir una vida llena de fe y bendiciones.

El Salmo 37:3 nos dice: «Confía en Jehová, y haz el bien; habita en la tierra, y pastorea la verdad.» Esta simple pero profunda declaración nos muestra tres principios fundamentales para vivir una vida plena y satisfactoria según la voluntad de Dios.

El primero de estos principios es confiar en Jehová. La confianza en Dios es el fundamento de nuestra relación con Él. Al confiar en el Señor, reconocemos que Él es nuestro proveedor, nuestro protector y nuestro guía. No importa cuáles sean las circunstancias que enfrentemos, podemos confiar en que Dios tiene el control y que Él siempre estará a nuestro lado.

Confíar en Jehová implica abandonar nuestras preocupaciones y ansiedades en sus manos, sabiendo que Él nos cuidará y nos llevará por el camino correcto. Es un acto de fe que nos permite descansar en la seguridad de que Dios siempre cumplirá sus promesas y nos dará la fuerza y la sabiduría que necesitamos para enfrentar cualquier desafío que se nos presente.

El segundo principio que encontramos en este versículo es hacer el bien. Dios nos ha llamado a vivir vidas de rectitud y bondad. Al hacer el bien, estamos reflejando el carácter de Cristo y compartiendo su amor con aquellos que nos rodean. No importa cuán pequeños o insignificantes puedan parecer nuestros actos de bondad, cada uno de ellos tiene el poder de marcar la diferencia en la vida de alguien.

Al hacer el bien, también estamos obedeciendo el mandato de Dios de amar a nuestro prójimo como a nosotros mismos. Es una forma práctica de demostrar nuestro amor por Dios y por los demás. Al ser instrumentos de bendición en las vidas de aquellos que nos rodean, estamos sembrando semillas de bondad que eventualmente darán fruto en la vida de otros.

El tercer principio que se nos presenta en este versículo es habitar en la tierra y pastorear la verdad. Esto implica vivir una vida en armonía con los principios y valores de Dios. Como cristianos, estamos llamados a ser luz en medio de la oscuridad y a vivir vidas que reflejen la verdad de su Palabra.

Habitar en la tierra y pastorear la verdad también significa ser fieles y constantes en nuestra relación con Dios. No debemos ser personas que solo buscan a Dios en momentos de dificultad, sino que debemos cultivar una comunión constante con Él a través de la oración, la lectura de la Biblia y la adoración.

Queridos hermanos y hermanas, la promesa de Salmo 37:3 es un recordatorio constante de cómo debemos vivir nuestras vidas como hijos de Dios. Confía en Jehová en todo momento, haz el bien a los demás y vive en armonía con los principios de Dios. Al hacerlo, experimentaremos su amor, su gracia y su bendición en abundancia.

Así que, hermanos y hermanas, no importa cuáles sean los desafíos que enfrentes en tu vida, recuerda siempre esta poderosa promesa: «Confía en Jehová, y haz el bien; habita en la tierra, y pastorea la verdad.»

Que esta promesa sea un faro de esperanza en medio de la oscuridad y una guía para vivir una vida plena y satisfactoria según la voluntad de Dios.

¡Que Dios les bendiga abundantemente!

Salmo 37:3 – «Confía en Jehová, y haz el bien; habita en la tierra, y pastorea la verdad.»