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Alaba al Señor con el Salmo 96 Reina Valera: ¡Un canto de alabanza celestial!


Salmo 96 Reina Valera: ¡Cantad a Jehová, toda la tierra!

Hermanos y hermanas en Cristo, hoy quiero compartir con ustedes un mensaje de esperanza y alabanza basado en el Salmo 96 de la Reina Valera. Este salmo nos invita a cantarle a Jehová, a proclamar su gloria y a anunciar su salvación a todas las naciones. En medio de los desafíos y dificultades que enfrentamos en estos tiempos inciertos, es importante recordar que Dios es digno de ser alabado y que su amor y misericordia son eternos.

El salmista comienza diciendo: «¡Cantad a Jehová, toda la tierra!» (Salmo 96:1). Esta es una invitación a todos nosotros, sin importar nuestra nacionalidad, raza o condición social, a unirnos en alabanza y adoración al único Dios verdadero. No importa cuán grande o pequeño sea nuestro problema, cantarle a Jehová nos llena de paz y nos recuerda que él está en control de todas las cosas.

En el versículo 3, leemos: «Decid entre las naciones: Jehová reina» (Salmo 96:3). Aquí se nos anima a proclamar la soberanía de Dios a todas las naciones. En un mundo lleno de caos y confusión, debemos recordar que Jehová es el Rey de reyes y Señor de señores. Él tiene el poder para traer paz a nuestras vidas y a nuestro mundo. No debemos temer, porque nuestro Dios es más grande que cualquier problema que enfrentemos.

El salmo continúa diciendo: «Dad a Jehová la gloria debida a su nombre; traed ofrenda y venid a sus atrios» (Salmo 96:8). Aquí se nos exhorta a ofrecerle a Dios nuestra adoración sincera y nuestras vidas como ofrenda. Él merece toda la gloria y la honra, y al rendirnos a él, experimentamos su gracia y bendición. No hay lugar mejor para estar que en su presencia, donde encontramos consuelo, dirección y fortaleza.

En medio de las pruebas y tribulaciones, es fácil caer en la desesperanza y la tristeza. Pero el Salmo 96 nos recuerda que Dios es nuestro refugio y fortaleza, un socorro bien presente en las angustias. En él encontramos consuelo y esperanza, porque él es el único que puede transformar nuestras vidas y darnos una nueva perspectiva.

Queridos hermanos y hermanas, les animo a que tomen un momento para reflexionar en el Salmo 96 de la Reina Valera. Que nuestras voces se unan en alabanza y adoración a Jehová, proclamando su grandeza y compartiendo su amor y salvación con aquellos que nos rodean. No importa cuál sea nuestra situación actual, recordemos que Dios es fiel y que su misericordia dura para siempre.

Termino este mensaje con las palabras del Salmo 96: «¡Cantad a Jehová, toda la tierra!» (Salmo 96:1). Que nuestra vida sea un testimonio vivo de la grandeza y fidelidad de nuestro Dios. Que nuestras acciones y palabras reflejen su amor y gracia. ¡Cantemos a Jehová, proclamemos su gloria y anunciemos su salvación a todas las naciones!

Salmo 96 Reina Valera. ¡Cantad a Jehová, toda la tierra!

Salmo 96 Reina Valera. ¡Cantad a Jehová, toda la tierra!

Salmo 96 Reina Valera. ¡Cantad a Jehová, toda la tierra!