Bajo Sus Alas Estarás Seguro
Hermanos y hermanas en Cristo, hoy quiero hablarles acerca de la maravillosa promesa que encontramos en la Palabra de Dios. En el Salmo 91:4, la Biblia nos dice: «Con sus plumas te cubrirá, y debajo de sus alas estarás seguro; escudo y adarga es su verdad». Esta poderosa declaración nos revela la protección y seguridad que encontramos al refugiarnos bajo las alas del Señor.
En la vida, todos enfrentamos momentos de dificultad, pruebas y tormentas. Nos encontramos con circunstancias que nos hacen sentir vulnerables y temerosos. Sin embargo, el Señor nos asegura que cuando nos refugiamos en Él, estamos seguros bajo Sus alas. Él es nuestro escudo y nuestra adarga, es decir, nuestra protección y defensa en todo tiempo.
¿Pero qué significa exactamente refugiarnos bajo las alas del Señor? Significa confiar en Él plenamente, depositar nuestra fe en Su poder y amor. Significa buscar Su presencia, buscar Su guía y dirección en cada aspecto de nuestra vida. Significa reconocer que Él es nuestra fortaleza en medio de la debilidad, nuestro refugio en medio de la tormenta.
Cuando nos refugiamos bajo las alas del Señor, encontramos consuelo en momentos de aflicción. Él nos envuelve con Su amor y nos sostiene en Su gracia. No importa cuán grandes sean los problemas que enfrentemos, podemos tener la seguridad de que no estamos solos. El Señor está con nosotros, cubriéndonos con Sus plumas y protegiéndonos de todo mal.
Además, al refugiarnos bajo las alas del Señor, también encontramos paz en medio del caos. En el mundo en el que vivimos, existe una constante lucha y confusión. Pero cuando buscamos al Señor y nos entregamos a Él, encontramos que Su paz trasciende todo entendimiento humano. Su paz nos guarda y nos mantiene en calma, incluso cuando las circunstancias a nuestro alrededor sean turbulentas.
Asimismo, al refugiarnos bajo las alas del Señor, encontramos fortaleza en momentos de debilidad. Él nos fortalece con Su Espíritu Santo y nos capacita para enfrentar cualquier situación que se presente en nuestro camino. No importa cuán débiles nos sintamos, podemos confiar en que Su poder se perfecciona en nuestra debilidad. Él nos levanta, nos restaura y nos renueva cada día.
Queridos hermanos y hermanas, les animo hoy a buscar refugio bajo las alas del Señor. No importa cuán abrumadores sean los problemas que enfrenten, cuán temerosos se sientan o cuán débiles se consideren. El Señor es su refugio seguro, Su amor y protección son inagotables. Él está listo para cubrirlos con Sus plumas y mantenerlos a salvo en todo momento.
Recuerden, «con sus plumas te cubrirá, y debajo de sus alas estarás seguro». No hay lugar más seguro que estar bajo las alas del Señor. Él es nuestro escudo y adarga, nuestra fortaleza y defensa. Confíen en Él, busquen Su presencia y experimenten Su amor y protección en sus vidas.
Bajo Sus Alas Estarás Seguro. Que esta verdad sea una realidad en cada uno de sus corazones. Que puedan encontrar consuelo, paz y fortaleza al refugiarse en el Señor. Que puedan experimentar Su amor y gracia en todo tiempo. Que puedan confiar en que Él cuidará de ustedes y los mantendrá a salvo bajo Sus alas.
Bajo Sus Alas Estarás Seguro. No olviden esta promesa y vivan cada día confiando en ella. Que el Señor los bendiga y los guarde siempre.
Bajo Sus Alas Estarás Seguro.