La ofrenda es un tema importante en la vida cristiana. A lo largo de la Biblia, encontramos numerosas citas bíblicas que nos hablan sobre la ofrenda y su importancia en nuestra relación con Dios. La ofrenda no se trata solo de dar dinero o recursos materiales, sino de ofrecer nuestro corazón y nuestra vida a Dios como un acto de adoración y gratitud.
En el libro de Proverbios 3:9-10, encontramos una cita bíblica de la ofrenda que nos enseña sobre la importancia de honrar a Dios con nuestras posesiones:
«Honra a Jehová con tus bienes, y con las primicias de todos tus frutos; y serán llenos tus graneros con abundancia, y tus lagares rebosarán de mosto.»
Esta cita nos anima a dar a Dios lo mejor de nuestras posesiones y lo primero de nuestros frutos. Cuando honramos a Dios con nuestras ofrendas, estamos reconociendo que todo lo que tenemos proviene de Él y que deseamos ponerlo al servicio de su reino. Además, la promesa de esta cita bíblica es que cuando honramos a Dios con nuestras ofrendas, Él nos bendecirá abundantemente.
La ofrenda no se trata solo de dar nuestros recursos materiales, sino también de ofrecer nuestro tiempo, talentos y habilidades para el servicio de Dios y de los demás. En el libro de Romanos 12:1, encontramos otra cita bíblica de la ofrenda que nos exhorta a ofrecer nuestro cuerpo como sacrificio vivo y santo, agradable a Dios:
«Así que, hermanos, os ruego por las misericordias de Dios, que presentéis vuestros cuerpos en sacrificio vivo, santo, agradable a Dios, que es vuestro culto racional.»
Esta cita nos recuerda que ofrecer nuestros cuerpos como sacrificio vivo implica vivir una vida en obediencia y sumisión a Dios. No se trata solo de hacer cosas para Dios, sino de ser transformados por su Espíritu y permitir que Él guíe cada área de nuestra vida. Al ofrecer nuestros cuerpos como sacrificio vivo, estamos demostrando nuestro amor y devoción a Dios.
La cita bíblica de la ofrenda también se encuentra en el libro de Malaquías 3:10, donde Dios nos desafía a traer todas las ofrendas al alfolí:
«Traed todos los diezmos al alfolí y haya alimento en mi casa; y probadme ahora en esto, dice Jehová de los ejércitos, si no os abriré las ventanas de los cielos, y derramaré sobre vosotros bendición hasta que sobreabunde.»
Esta cita nos habla sobre la importancia de los diezmos y ofrendas en la vida del creyente. Dios nos desafía a confiar en Él y a obedecer su mandato de ofrendar, prometiendo bendición abundante en nuestras vidas. Al ofrendar, estamos demostrando nuestra confianza en Dios como nuestro proveedor y reconociendo que todo lo que tenemos proviene de Él.
En resumen, la ofrenda es un acto de adoración y gratitud hacia Dios. No se trata solo de dar nuestros recursos materiales, sino de ofrecer nuestro corazón y nuestra vida a Él. A través de la ofrenda, honramos a Dios, reconocemos su provisión en nuestras vidas y demostramos nuestra confianza en Él como nuestro proveedor. Que cada uno de nosotros pueda reflexionar sobre estas citas bíblicas de la ofrenda y tomar la decisión de ser ofrendantes generosos, no solo con nuestros recursos materiales, sino con todo lo que somos y tenemos. Que podamos experimentar la abundante bendición de Dios en nuestras vidas al honrarlo con nuestras ofrendas.
Cita Bíblica De La Ofrenda
Proverbios 3:9-10: «Honra a Jehová con tus bienes, y con las primicias de todos tus frutos; y serán llenos tus graneros con abundancia, y tus lagares rebosarán de mosto.»
Romanos 12:1: «Así que, hermanos, os ruego por las misericordias de Dios, que presentéis vuestros cuerpos en sacrificio vivo, santo, agradable a Dios, que es vuestro culto racional.»
Malaquías 3:10: «Traed todos los diezmos al alfolí y haya alimento en mi casa; y probadme ahora en esto, dice Jehová de los ejércitos, si no os abriré las ventanas de los cielos, y derramaré sobre vosotros bendición hasta que sobreabunde.»