Cita Bíblica: El Buen Pastor
¡Buen día, amados hermanos y hermanas en Cristo! Hoy nos reunimos para reflexionar sobre una de las citas bíblicas más reconfortantes y poderosas: «Yo soy el buen pastor» (Juan 10:11). Estas palabras nos recuerdan que tenemos un Dios amoroso y fiel que nos guía y cuida en todo momento.
El concepto del «buen pastor» es una metáfora que Jesús utilizó para describirse a sí mismo y su relación con nosotros, su rebaño. En ese tiempo, la figura del pastor era muy familiar para la gente, ya que el pastoreo de ovejas era una actividad común en la sociedad agrícola de aquel entonces. Jesús aprovechó esta imagen para transmitirnos un mensaje de esperanza y protección.
Cuando Jesús se declara como el buen pastor, nos está diciendo que Él es el único que puede cuidarnos y protegernos de manera perfecta. Él nos conoce íntimamente, sabe nuestras necesidades y anhelos más profundos. Como dice el salmista en el libro de los Salmos 23:1, «Jehová es mi pastor; nada me faltará.» Nuestro buen pastor nos provee de todo lo que necesitamos, tanto física como espiritualmente.
Además, Jesús nos muestra su amor incondicional al afirmar en Juan 10:14: «Yo soy el buen pastor; y conozco mis ovejas, y las mías me conocen.» Él nos conoce individualmente, sabe nuestro nombre, nuestras debilidades y nuestras fortalezas. No somos simplemente un número en la multitud para Él, somos importantes y valiosos para nuestro buen pastor.
El buen pastor es aquel que está dispuesto a dar su vida por sus ovejas. Jesús lo declara en Juan 10:11: «Yo soy el buen pastor; el buen pastor su vida da por las ovejas.» No importa cuán perdidos o heridos estemos, Él siempre estará allí para rescatarnos y sanar nuestras heridas. Su amor es tan grande que dio su vida en la cruz para redimirnos del pecado y reconciliarnos con Dios.
Como ovejas del buen pastor, debemos aprender a confiar en Él y seguir su voz. Juan 10:27 nos dice: «Mis ovejas oyen mi voz, y yo las conozco, y me siguen.» A veces, podemos sentirnos confundidos o desorientados en nuestra vida espiritual, pero si aprendemos a escuchar la voz de nuestro buen pastor, Él nos guiará por caminos de justicia y paz.
Nuestro buen pastor también nos promete seguridad y protección en medio de los peligros. En Juan 10:28, Jesús nos dice: «Y yo les doy vida eterna; y no perecerán jamás, ni nadie las arrebatará de mi mano.» Podemos confiar en que nada ni nadie podrá separarnos del amor y el cuidado de nuestro buen pastor. Él nos guarda y nos protege en todo momento.
Queridos hermanos y hermanas, recordemos siempre la hermosa promesa del buen pastor: «Yo soy el buen pastor» (Juan 10:11). En medio de los desafíos y tribulaciones de la vida, Él está allí, dispuesto a cuidarnos, protegernos y amarnos incondicionalmente. Nuestro buen pastor nos guía hacia pastos verdeantes y aguas tranquilas, donde encontramos descanso y restauración para nuestras almas.
En conclusión, el concepto del buen pastor nos recuerda el amor y la fidelidad de nuestro Señor Jesucristo hacia nosotros. Él es el único que puede satisfacer nuestras necesidades más profundas y cuidarnos de manera perfecta. Sigamos su voz, confiemos en su cuidado y encontremos consuelo en su amor eterno. Que estas palabras nos inspiren a vivir una vida plena y abundante en la presencia del buen pastor.
Cita Bíblica: El Buen Pastor
¡Queridos hermanos y hermanas en Cristo, que la paz del buen pastor esté con todos ustedes! Hoy nos despedimos con la hermosa promesa de Jesús: «Yo soy el buen pastor» (Juan 10:11). Que estas palabras permanezcan en nuestros corazones y nos inspiren a confiar en su amor, seguir su voz y descansar en su cuidado. ¡Que Dios los bendiga abundantemente!