Cita Bíblica No He Visto Justo Desamparado
¡Saludos, amados hermanos y hermanas en Cristo! Hoy quiero compartir con ustedes un mensaje de esperanza y fortaleza basado en una poderosa cita bíblica que nos recuerda la fidelidad de nuestro Dios. En el Salmo 37:25, leemos: «No he visto justo desamparado, ni su descendencia que mendigue pan» (RV 1960).
Esta hermosa promesa nos habla del cuidado y la provisión de Dios para aquellos que le siguen fielmente. A menudo, en medio de nuestras dificultades y luchas diarias, podemos sentirnos desamparados y desesperanzados. Sin embargo, la Palabra de Dios nos asegura que nuestro Padre celestial está siempre presente y dispuesto a ayudarnos.
En primer lugar, esta cita nos recuerda que Dios nunca abandona a los justos. Aunque a veces pareciera que los impíos prosperan y los justos sufren, debemos recordar que nuestra recompensa no se encuentra en este mundo, sino en el reino eterno de Dios. Él conoce nuestros corazones y nuestras luchas, y no nos dejará solos en medio de ellas.
Además, esta cita nos asegura que la descendencia de los justos no mendigará pan. Esto implica que Dios proveerá para nuestras necesidades físicas y materiales. No debemos preocuparnos por nuestra provisión diaria, ya que nuestro Padre celestial conoce nuestras necesidades y nos dará lo que necesitamos en su tiempo perfecto. Como dice Jesús en Mateo 6:26: «Mirad las aves del cielo, que no siembran, ni siegan, ni recogen en graneros; y vuestro Padre celestial las alimenta. ¿No valéis vosotros mucho más que ellas?» (RV 1960).
Hermanos y hermanas, esta cita bíblica es un recordatorio poderoso de que Dios está con nosotros en todo momento y que nunca nos abandonará. No importa cuán difíciles sean nuestras circunstancias, podemos confiar en que Él nos cuidará y suplirá nuestras necesidades.
Cuando enfrentemos momentos de desánimo o incertidumbre, recordemos estas palabras y coloquemos nuestra confianza en el Señor. Él es nuestra fortaleza y nuestro refugio en todo momento. Podemos acercarnos a Él en oración y depositar nuestras cargas y preocupaciones en sus manos amorosas.
Además, debemos recordar que nuestras necesidades físicas no son lo más importante. Si bien Dios se preocupa por nuestras necesidades materiales, su mayor preocupación es nuestro bienestar espiritual. Él desea que confiemos en Él y pongamos nuestra fe en su poder salvador.
Queridos hermanos y hermanas, cuando nos sintamos desamparados o desesperanzados, recordemos la promesa de Dios en Salmo 37:25. No hemos de temer, porque nuestro Padre celestial es fiel y nunca nos abandonará. Él suplirá todas nuestras necesidades y nos dará la fuerza para enfrentar cualquier situación que se nos presente.
En conclusión, la cita bíblica «No he visto justo desamparado, ni su descendencia que mendigue pan» nos llena de esperanza y seguridad en el cuidado de nuestro Dios. Recordemos que Él siempre está con nosotros, cuidándonos y proveyendo para nuestras necesidades. Confíemos en su fidelidad y pongamos nuestra fe en Él. Que esta verdad nos fortalezca y anime en nuestra caminar diario con Cristo.
Que la paz y el amor de nuestro Señor Jesucristo inunde sus corazones y les dé la confianza para enfrentar cualquier situación. No olvidemos nunca esta hermosa promesa de Dios: «No he visto justo desamparado, ni su descendencia que mendigue pan» (Salmo 37:25, RV 1960). Amén y amén.
Cita Bíblica No He Visto Justo Desamparado