Cita Bíblica de Ofrendas y Diezmos: Malaquías 3:10
Queridos hermanos y hermanas en Cristo, hoy quiero hablarles sobre la importancia de las ofrendas y los diezmos en nuestra vida como creyentes. En la Biblia, encontramos instrucciones claras acerca de cómo debemos administrar nuestros recursos y cómo podemos bendecir a otros a través de la generosidad.
En Malaquías 3:10, leemos: «Traed todos los diezmos al alfolí y haya alimento en mi casa; y probadme ahora en esto, dice Jehová de los ejércitos, si no os abriré las ventanas de los cielos, y derramaré sobre vosotros bendición hasta que sobreabunde». Esta es una poderosa promesa de Dios para aquellos que obedecen su mandato de entregar el diezmo.
El diezmo es una forma de devolver a Dios una décima parte de nuestros ingresos. Al hacer esto, estamos reconociendo que todo lo que tenemos proviene de Él y que confiamos en Él como nuestro proveedor. Al entregar el diezmo, estamos sembrando en el reino de Dios y permitiendo que Él multiplique nuestras bendiciones.
Pero más allá de los diezmos, la Biblia también nos enseña sobre la importancia de las ofrendas. En 2 Corintios 9:7 leemos: «Cada uno dé como propuso en su corazón: no con tristeza, ni por necesidad, porque Dios ama al dador alegre». Las ofrendas son un acto de generosidad voluntaria, donde damos más allá del diezmo, según lo que Dios ponga en nuestro corazón.
Cuando damos nuestras ofrendas, estamos sembrando en el reino de Dios y permitiendo que Él use nuestros recursos para bendecir a otros. Nuestras ofrendas pueden ser utilizadas para apoyar la obra de la iglesia, alimentar a los necesitados, ayudar a misioneros, entre muchas otras cosas. Es un privilegio y una responsabilidad como creyentes ser buenos administradores de los recursos que Dios nos ha dado.
La Biblia nos enseña que Dios ama al dador alegre. Cuando damos nuestras ofrendas y diezmos con gozo y gratitud en nuestros corazones, estamos demostrando nuestra confianza en Dios y nuestra obediencia a Su Palabra. Dios no necesita nuestro dinero, pero Él quiere que aprendamos a confiar en Él y a depender de Él en todas las áreas de nuestras vidas, incluyendo nuestras finanzas.
Cuando entregamos nuestras ofrendas y diezmos fielmente, Dios promete abrir las ventanas de los cielos y derramar bendiciones sobre nosotros hasta que sobreabunden. Esto no significa necesariamente que siempre recibiremos prosperidad financiera, pero sí significa que Dios nos proveerá de todo lo que necesitamos y nos bendecirá de muchas maneras diferentes.
Hermanos y hermanas, les animo a que vivan una vida de generosidad y obediencia a Dios en el área de las ofrendas y los diezmos. No lo hagan por obligación, sino con alegría y gratitud en sus corazones. Confíen en que Dios cumplirá Su promesa de bendición y proveerá para todas sus necesidades.
Recuerden siempre la Cita Bíblica de Ofrendas y Diezmos: Malaquías 3:10. Confíen en la fidelidad de Dios y en Su amor por ustedes. Él es un Dios generoso y fiel, y desea bendecirlos abundantemente.
Que la gracia y la paz de nuestro Señor Jesucristo estén con ustedes siempre. Amen.
Cita Bíblica de Ofrendas y Diezmos: Malaquías 3:10