Cita Bíblica: Pedid y se os dará
¡Hola, queridos hermanos y hermanas en Cristo! Hoy quiero compartir con ustedes la maravillosa promesa que encontramos en la Palabra de Dios, específicamente en Mateo 7:7 donde Jesús nos dice: «Pedid, y se os dará; buscad, y hallaréis; llamad, y se os abrirá».
En esta breve pero poderosa cita bíblica, Jesús nos enseña la importancia de la oración y la confianza en Dios. Nos anima a pedir, buscar y llamar, asegurándonos que seremos escuchados y atendidos por nuestro Padre celestial. ¿No es esto increíblemente inspirador?
La oración es un poderoso medio de comunicación con Dios. Nos permite acercarnos a Él, expresar nuestras necesidades, anhelos y preocupaciones. Es un canal directo para recibir respuesta y dirección divina. Y Jesús nos anima a aprovechar este regalo que Dios nos ha dado.
Cuando pedimos, no solo estamos presentando nuestras peticiones a nuestro Padre celestial, sino que también estamos reconociendo que dependemos completamente de Él. Estamos confiando en Su sabiduría y provisión. En Filipenses 4:6 se nos dice: «Por nada estéis afanosos, sino sean conocidas vuestras peticiones delante de Dios en toda oración y ruego, con acción de gracias».
Es importante recordar que pedir a Dios no significa exigir o reclamar. Más bien, es un acto de humildad y reverencia. Estamos presentando nuestras necesidades y deseos, pero siempre sometidos a la voluntad de Dios. Como Jesús mismo nos enseñó a orar en Mateo 6:10: «Venga tu reino. Hágase tu voluntad, como en el cielo, así también en la tierra».
La promesa de Jesús también nos invita a buscar. No solo debemos pedir, sino también estar dispuestos a buscar activamente la presencia de Dios, Su dirección y Su voluntad para nuestras vidas. Como está escrito en Jeremías 29:13: «Y me buscaréis y me hallaréis, porque me buscaréis de todo vuestro corazón».
Buscar implica dedicar tiempo a la lectura y meditación de la Palabra de Dios, a la comunión con otros creyentes y a la adoración. Es un acto de rendición y entrega total a Dios. Y cuando lo hacemos de corazón, promete que lo encontraremos.
Finalmente, Jesús nos anima a llamar. Esto implica una actitud persistente y constante de buscar a Dios, incluso cuando no vemos respuestas inmediatas a nuestras oraciones. En Lucas 18:1-8, Jesús nos cuenta la parábola de la viuda persistente, quien a pesar de enfrentar una injusticia, no se dio por vencida y continuó llamando al juez para que le hiciera justicia. Al final, el juez injusto la escuchó por su perseverancia.
Nuestro Padre celestial es mucho más amoroso y justo que el juez de la parábola. Si perseveramos en nuestra búsqueda y llamado a Dios, Él nos escuchará y nos responderá. Quizás no siempre de la manera que esperamos, pero siempre de la manera que es mejor para nosotros.
Queridos hermanos y hermanas, la cita bíblica «Pedid y se os dará» es una promesa maravillosa y alentadora. Nos recuerda que tenemos acceso directo a nuestro Padre celestial a través de la oración. Nos anima a depender de Él en todas las áreas de nuestras vidas y a confiar en Su amor y provisión.
Así que, no dudemos en pedir, buscar y llamar a nuestro Dios. Él nos está esperando con los brazos abiertos, dispuesto a escuchar nuestras peticiones, a guiarnos y a bendecirnos abundantemente.
Recuerda, «Pedid y se os dará; buscad, y hallaréis; llamad, y se os abrirá». ¡Que esta promesa sea un recordatorio constante de la fidelidad y el amor de nuestro Padre celestial en tu vida!
Cita Bíblica: Pedid y se os dará