Salmos 37:4 Nvi: «Deléitate asimismo en Jehová, y él te concederá las peticiones de tu corazón.»
Queridos hermanos y hermanas en Cristo,
Hoy quiero compartir con ustedes una hermosa promesa que se encuentra en el libro de los Salmos, específicamente en el capítulo 37, versículo 4. Esta promesa nos dice: «Deléitate asimismo en Jehová, y él te concederá las peticiones de tu corazón.»
Cuando leemos esta promesa, podemos experimentar una gran alegría y esperanza en nuestros corazones. Dios nos está invitando a deleitarnos en Él, a encontrar nuestra satisfacción en Su presencia. Pero, ¿qué significa realmente deleitarse en Jehová?
Deleitarse en Jehová implica poner a Dios en el centro de nuestras vidas. Significa amarlo y buscarlo con todo nuestro corazón, alma y mente. Es encontrar gozo y satisfacción en Su amor, en Su palabra y en Su presencia. Es reconocer que Él es nuestro refugio y fortaleza, y que en Él encontramos todo lo que necesitamos.
Cuando nos deleitamos en Jehová, nuestra perspectiva cambia. Dejamos de preocuparnos por las cosas temporales y nos enfocamos en lo eterno. Nuestros deseos y anhelos se alinean con los de Dios, y nuestras peticiones se convierten en deseos que Él mismo quiere cumplir en nuestras vidas.
Es importante destacar que Dios no promete concedernos todo lo que queremos, sino todo lo que necesitamos de acuerdo a Su voluntad. A medida que nos deleitamos en Él, nuestro corazón se alinea con el suyo, y nuestros deseos se transforman en deseos santos y justos. Buscamos Su reino y Su justicia en primer lugar, confiando en que Él suplirá todas nuestras necesidades.
A lo largo de la Biblia, vemos ejemplos de personas que se deleitaron en Jehová y experimentaron Su fidelidad. David, por ejemplo, fue un hombre conforme al corazón de Dios. A pesar de las dificultades que enfrentó, siempre buscó la presencia de Dios y confió en Sus promesas. Como resultado, Dios lo bendijo abundantemente y cumplió los deseos de su corazón.
Queridos hermanos y hermanas, hoy quiero animarlos a deleitarse en Jehová. No importa cuál sea tu situación actual, no importa las dificultades que enfrentes, Dios está contigo y desea concederte las peticiones de tu corazón. Pero primero, debes encontrar tu gozo y satisfacción en Él. Busca Su rostro, medita en Su palabra y confía en Su fidelidad.
Cuando te deleitas en Jehová, experimentarás una paz que sobrepasa todo entendimiento. Tus cargas serán aligeradas y encontrarás consuelo en Su presencia. Él te guiará y te dará sabiduría en cada paso que des. No temas, porque Él está contigo y cumplirá Sus promesas en tu vida.
Así que, amados hermanos y hermanas, hoy te animo a que te deleites en Jehová. No busques la satisfacción en las cosas del mundo, sino en el amor y la gracia de nuestro Dios. Él es digno de toda nuestra adoración y alabanza. Confía en Él y deja que Él cumpla las peticiones de tu corazón.
Recuerda siempre las palabras del Salmo 37:4 Nvi: «Deléitate asimismo en Jehová, y él te concederá las peticiones de tu corazón.» ¡Qué hermosa promesa! Que esta sea nuestra guía y fuente de esperanza en todos los aspectos de nuestras vidas.
Que la gracia y la paz de nuestro Señor Jesucristo estén con ustedes siempre.
Salmos 37:4 Nvi: «Deléitate asimismo en Jehová, y él te concederá las peticiones de tu corazón.»