Salmo 46:11 – «Estad quietos, y conoced que yo soy Dios; seré exaltado entre las naciones; enaltecido seré en la tierra.» (RV)
Queridos hermanos y hermanas en Cristo,
Hoy quiero compartir con ustedes una poderosa promesa que encontramos en el Salmo 46:11. En este versículo, Dios nos invita a estar quietos y reconocer que Él es Dios. Es una invitación a confiar en Su poder, a descansar en Su presencia y a rendirnos a Su voluntad.
En un mundo lleno de ruido y caos, es fácil sentirnos abrumados y perdidos. Nos bombardean con noticias negativas, problemas personales, y responsabilidades diarias que parecen inabarcables. Sin embargo, en medio de todo esto, Dios nos llama a detenernos y recordar quién Él es.
La primera parte del versículo nos dice: «Estad quietos». A veces, necesitamos frenar nuestro ritmo acelerado y encontrar un tiempo de silencio para estar en la presencia de Dios. En ese espacio de quietud, podemos escuchar Su voz y recibir Su paz que sobrepasa todo entendimiento. Es en ese lugar de calma que encontramos fuerzas renovadas para enfrentar los desafíos y luchas de la vida.
Pero no solo se nos pide estar quietos, sino también conocer a Dios. Conocer a Dios implica tener una relación íntima con Él, es buscarlo diligentemente, estudiar Su Palabra y experimentar Su amor y gracia en nuestras vidas. Cuando conocemos a Dios, reconocemos Su grandeza, Su poder y Su fidelidad. Entendemos que Él tiene todo bajo control y que podemos confiar en Él en todo momento.
La segunda parte del versículo nos dice: «Seré exaltado entre las naciones; enaltecido seré en la tierra». Esto nos recuerda que Dios es soberano y que Su gloria será manifestada en todo el mundo. Aunque vivimos en un mundo caído y lleno de pecado, Dios sigue siendo el Rey sobre todas las naciones. Él tiene el control absoluto y Su propósito prevalecerá.
Cuando entendemos esta verdad, nuestra perspectiva cambia. Ya no nos afanamos por las circunstancias difíciles, sino que confiamos en que Dios está obrando en medio de ellas. No importa cuán oscuro sea el panorama, podemos tener la seguridad de que Dios está en control y Él será exaltado.
Hermanos y hermanas, en este tiempo de incertidumbre y angustia, quiero animarlos a meditar en este poderoso versículo del Salmo 46:11. Estad quietos y conoced que Él es Dios. Permitan que Su paz y Su amor llenen sus corazones y les den la confianza para enfrentar cualquier desafío que se les presente.
Recordemos que nuestra fe no se basa en las circunstancias que nos rodean, sino en la fidelidad de nuestro Dios. Él es el mismo ayer, hoy y siempre. Su amor y poder nunca cambian.
Así que, queridos hermanos y hermanas, encomendémonos a Él, confiemos en Su guía y descansen en Su promesa. Estemos quietos y conozcamos que Él es Dios. Él será exaltado entre las naciones y enaltecido en la tierra.
Que esta verdad nos impulse a vivir con valentía, esperanza y fe, sabiendo que nuestro Dios está con nosotros y Su plan perfecto se cumplirá.
Que la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guarde vuestros corazones y mentes en Cristo Jesús. Amén.
Salmo 46:11 – «Estad quietos, y conoced que yo soy Dios; seré exaltado entre las naciones; enaltecido seré en la tierra.» (RV)