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El sorprendente Texto Bíblico: ¡Jesús lloró! 💧


Texto Bíblico: Jesús Lloró

¡Saludos, amados hermanos y hermanas en Cristo! Hoy quiero hablarles sobre un pasaje bíblico muy conmovedor: el texto bíblico «Jesús Lloró». Este relato nos muestra una faceta única de nuestro Señor Jesucristo, revelando su compasión y amor profundo por la humanidad.

En el Evangelio según San Juan, capítulo 11, encontramos la historia de la muerte de Lázaro, un amigo cercano de Jesús. Cuando Jesús llegó al pueblo de Betania y se encontró con la hermana de Lázaro, Marta, y María, quienes estaban angustiadas por la muerte de su hermano, algo poderoso ocurrió. El versículo 35 nos dice: «Jesús lloró».

Estas dos palabras tan sencillas, pero llenas de significado, nos revelan la humanidad de Jesús y su profundo amor por nosotros. Aunque Jesús sabía que iba a resucitar a Lázaro, no pudo evitar conmoverse y llorar ante la escena de dolor y pérdida que tenía delante de sí.

Hermanos y hermanas, esto nos enseña que Jesús es un Dios compasivo y sensible a nuestras luchas y sufrimientos. Él no es indiferente a nuestras lágrimas, sino que las comparte con nosotros. En momentos de dolor y tristeza, podemos encontrar consuelo en saber que Jesús comprende nuestras emociones y está dispuesto a estar a nuestro lado.

El llanto de Jesús también nos muestra su poder para transformar nuestras situaciones más desesperadas. Aunque Lázaro había estado muerto por cuatro días, Jesús lo resucitó con una sola palabra. ¡Qué milagro tan glorioso! Jesús demostró que no hay situación sin esperanza cuando Él está presente.

Es importante destacar que la respuesta de Jesús no fue solo un acto de poder divino, sino también un acto de amor. El versículo 36 nos dice que los judíos que presenciaron esta escena exclamaron: «Mirad cómo lo amaba». Jesús no solo quería mostrar su poder, sino también su amor incondicional por Lázaro y su familia.

Hermanos y hermanas, este texto bíblico nos inspira a confiar en el amor de Jesús en medio de nuestras pruebas y tribulaciones. Él es capaz de obrar milagros en nuestras vidas y restaurar lo que parecía perdido. ¡Nuestro Salvador es el Dios de lo imposible!

Además, Jesús nos enseña a ser compasivos y amorosos hacia los demás. En el versículo 33, vemos que Jesús fue profundamente conmovido por el llanto de María y los judíos que la acompañaban. Él compartió su dolor y se solidarizó con ellos. Como seguidores de Cristo, también debemos ser sensibles al sufrimiento de los demás y estar dispuestos a consolar y apoyar.

En conclusión, el texto bíblico «Jesús Lloró» nos recuerda que nuestro Señor Jesucristo es un Dios compasivo y poderoso. Él no solo lloró por Lázaro, sino que también llora con nosotros en nuestras aflicciones. Su amor incondicional y su poder para transformar nuestras vidas son una fuente de esperanza y consuelo.

Amados hermanos y hermanas, que este texto bíblico nos inspire a confiar en Jesús en todo momento, sabiendo que Él está con nosotros en nuestras lágrimas y nos guiará hacia la victoria. En medio de nuestras pruebas, recordemos siempre las palabras del texto bíblico: «Jesús Lloró».

¡Que la gracia del Señor Jesucristo sea con todos ustedes!