Versículo de la Gran Comisión: ¡Un llamado a cumplir la misión de Dios!
Introducción:
¡Saludos en el nombre de nuestro Señor Jesucristo! Hoy quiero compartir contigo un pasaje bíblico que nos desafía y nos inspira a cumplir la misión que Dios nos ha encomendado. Este pasaje, conocido como el «Versículo de la Gran Comisión», se encuentra en el Evangelio de Mateo, capítulo 28, versículo 19. Permíteme presentártelo en su versión original en la Reina Valera:
Mateo 28:19 (Reina Valera): «Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo.»
Desarrollo:
La Gran Comisión es una orden directa de nuestro Señor Jesucristo a todos los creyentes. Jesús nos llama a ir y hacer discípulos en todas las naciones. Esta es una tarea crucial y de gran importancia para todos los seguidores de Cristo. No es una opción, sino una responsabilidad que debemos asumir con alegría y compromiso.
1. La importancia de la Gran Comisión:
La Gran Comisión es un llamado a llevar el mensaje de salvación a todas las personas. Dios nos ha dado la tarea de compartir el amor y la verdad de Cristo con aquellos que aún no le conocen. No importa dónde nos encontremos, en nuestra ciudad, nuestro país o en cualquier parte del mundo, la Gran Comisión nos llama a ser embajadores de Cristo y a proclamar su nombre.
2. El poder y la autoridad para cumplir la Gran Comisión:
En el versículo anterior al Versículo de la Gran Comisión, Jesús declara: «Toda potestad me es dada en el cielo y en la tierra» (Mateo 28:18, Reina Valera). Esta declaración nos muestra que tenemos a nuestro lado al Dios Todopoderoso, quien nos capacita y nos da la autoridad para cumplir esta misión. No estamos solos en esta tarea, sino que contamos con el poder y la guía del Espíritu Santo.
3. El enfoque de la Gran Comisión:
La Gran Comisión no se trata solo de predicar el evangelio, sino de hacer discípulos. Jesús nos llama a enseñar a las personas a seguir sus enseñanzas y a vivir conforme a su voluntad. No solo debemos llevar a las personas a la fe, sino acompañarlas en su crecimiento espiritual y ayudarles a convertirse en discípulos comprometidos con Cristo.
4. La Gran Comisión y el bautismo:
En el Versículo de la Gran Comisión, Jesús nos instruye a bautizar a aquellos que creen en él. El bautismo es un acto de obediencia y una declaración pública de fe en Jesucristo. A través del bautismo, mostramos al mundo que hemos sido transformados por la gracia de Dios y que ahora pertenecemos a su familia. Es un paso importante en el camino del discipulado.
Conclusión:
Querido hermano o hermana en Cristo, la Gran Comisión es un llamado divino que debemos tomar en serio. No importa quiénes seamos o cuáles sean nuestras habilidades, Dios nos ha llamado a ser parte de su plan de redención para la humanidad. No necesitamos ser teólogos o predicadores famosos, solo necesitamos tener un corazón dispuesto y obediente.
Recordemos siempre el Versículo de la Gran Comisión: «Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo» (Mateo 28:19, Reina Valera).
Que este versículo sea nuestro recordatorio constante de la misión que Dios nos ha encomendado. Que nos inspire a ser valientes y audaces en el cumplimiento de esta tarea. Que el amor de Cristo nos impulse a llevar su mensaje de salvación a todos los rincones del mundo.
¡Cumplamos juntos la Gran Comisión y hagamos discípulos para la gloria de Dios!
Versículo de la Gran Comisión: «Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo» (Mateo 28:19, Reina Valera).