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Escándalo en la Cita Bíblica: Mujer Adúltera


Cita Bíblica: Mujer Adúltera

¡Saludos, amados hermanos y hermanas en Cristo! Hoy quiero compartir con ustedes una historia poderosa y llena de gracia que se encuentra en la Biblia, en el libro de Juan, capítulo 8, versículos 1 al 11. Esta historia, conocida como “la mujer adúltera”, nos enseña lecciones valiosas sobre el amor y la misericordia de nuestro Señor Jesucristo.

La Cita Bíblica: Mujer Adúltera nos presenta a una mujer atrapada en un acto de adulterio. Los fariseos y los escribas la llevaron ante Jesús, buscando atraparlo en un dilema. Según la ley de Moisés, la mujer merecía ser apedreada hasta la muerte. Pero Jesús, lleno de compasión y sabiduría divina, respondió de una manera que dejó a todos asombrados. Él dijo: “El que de vosotros esté sin pecado, sea el primero en arrojar la piedra contra ella” (Juan 8:7).

En este pasaje, vemos cómo Jesús desafió a aquellos que querían condenar a la mujer. Él mostró que todos somos pecadores y que no tenemos el derecho de juzgar a los demás. Como cristianos, a menudo caemos en la trampa de señalar con el dedo a aquellos que han pecado, olvidando que nosotros también necesitamos el perdón de Dios. Jesús nos recuerda que todos somos iguales ante los ojos de Dios y que solo Él tiene la autoridad para juzgar.

La historia continúa con los fariseos y los escribas, uno a uno, dejando caer sus piedras y retirándose. Solo quedó Jesús y la mujer adúltera. Entonces, Jesús le preguntó: “Mujer, ¿dónde están los que te acusaban? ¿Ninguno te condenó?” (Juan 8:10). Ella respondió: “Ninguno, Señor”. Jesús, lleno de gracia y misericordia, le dijo: “Ni yo te condeno; vete, y no peques más” (Juan 8:11).

En este pasaje, vemos la profunda compasión de Jesús hacia la mujer adúltera. En lugar de condenarla, Él le ofrece perdón y una nueva oportunidad para cambiar su vida. Jesús nos enseña que no importa qué tan grande sea nuestro pecado, siempre hay esperanza en Él. Él nos ofrece su perdón inmerecido y nos anima a alejarnos del pecado y vivir una vida en obediencia a Dios.

La historia de la mujer adúltera nos recuerda que la gracia y la misericordia de Dios son insondables. A menudo, nos encontramos atrapados en el ciclo del pecado y la culpa, sintiéndonos indignos del amor de Dios. Pero Jesús nos muestra que no hay pecado tan grande que su gracia no pueda cubrir. Él está dispuesto a perdonarnos y a darnos una nueva vida en Él.

Como hijos e hijas de Dios, debemos aprender de este pasaje y aplicarlo en nuestras propias vidas. Debemos recordar que no somos llamados a juzgar a los demás, sino a amarlos y mostrarles el amor de Cristo. Debemos ser portadores de la gracia y la misericordia de Dios hacia aquellos que han caído en el pecado. Debemos ser instrumentos de restauración y esperanza, mostrando a otros el camino hacia la redención que solo se encuentra en Jesús.

En conclusión, la Cita Bíblica: Mujer Adúltera nos enseña lecciones poderosas sobre el amor y la gracia de nuestro Señor Jesucristo. Nos recuerda que todos somos pecadores y que no tenemos el derecho de juzgar a los demás. Nos muestra la profunda compasión de Jesús hacia aquellos que han caído en el pecado, ofreciéndoles perdón y una nueva oportunidad para cambiar sus vidas. Que esta historia nos inspire a vivir en obediencia a Dios y a ser portadores de su gracia y misericordia hacia aquellos que nos rodean.

Cita Bíblica: Mujer Adúltera, una historia que nos revela el amor y la misericordia de nuestro Salvador. Que podamos aprender de ella y aplicar sus enseñanzas en nuestra vida diaria. Que podamos ser instrumentos de cambio y esperanza en un mundo que tanto necesita del amor de Dios. Que podamos mostrar a otros el camino hacia la redención y la salvación que solo se encuentra en Jesús. ¡Gloria a Dios por su gracia inmerecida! Amén.

Cita Bíblica: Mujer Adúltera.