Texto Bíblico Sobre Las Ofrendas
Queridos hermanos y hermanas en Cristo,
Hoy nos reunimos para reflexionar y meditar en la importancia de las ofrendas en nuestra vida cristiana. Las ofrendas son una manera tangible de expresar nuestra gratitud y adoración a nuestro amado Señor. A través de ellas, demostramos nuestra confianza en su provisión y nuestro deseo de participar en su obra en la tierra.
Desde tiempos antiguos, encontramos en la Biblia ejemplos de personas que ofrecieron sus dones y ofrendas al Señor. Uno de los primeros textos bíblicos sobre las ofrendas se encuentra en Génesis 4:3-5. Allí vemos cómo Caín y Abel presentaron ofrendas al Señor. Abel ofreció lo mejor de sus ovejas, mientras que Caín solo ofreció algunos frutos de la tierra. Sin embargo, Dios aceptó la ofrenda de Abel y no la de Caín. ¿Por qué? La Biblia nos enseña que Dios mira el corazón de aquellos que le ofrecen algo. Abel ofreció su ofrenda con un corazón sincero y generoso, mientras que Caín lo hizo de manera negligente y egoísta.
Este pasaje nos enseña una lección importante: nuestras ofrendas deben ser dadas con un corazón puro y generoso. No se trata solo de la cantidad o el tipo de ofrenda que presentamos, sino de la actitud con la que lo hacemos. En 2 Corintios 9:7 leemos: “Cada uno dé como propuso en su corazón: no con tristeza, ni por necesidad, porque Dios ama al dador alegre”. Nuestro Señor se deleita en aquellos que dan con alegría y generosidad, porque refleja su propio carácter generoso.
Además, las ofrendas también son una expresión de nuestra fe y confianza en Dios como nuestro proveedor. En Malaquías 3:10, el Señor nos desafía a traer todas las ofrendas al alfolí y probarlo en cuanto a su fidelidad. Él promete abrir las ventanas de los cielos y derramar bendiciones hasta que sobreabunde. Es un hermoso intercambio: nosotros confiamos en Dios y le ofrecemos nuestras ofrendas, y él nos bendice abundantemente en respuesta a nuestra fe.
Asimismo, las ofrendas nos brindan la oportunidad de participar en la obra de Dios en la tierra. En el libro de Nehemías, vemos cómo el pueblo respondió generosamente y ofreció sus dones para la reconstrucción del templo. Nehemías 10:39 nos dice: “Pues los hijos de Israel y los hijos de Leví traerán ofrenda del grano, del vino y del aceite a los aposentos de las vasijas del santuario, y allí estarán los utensilios del ministerio, el pan de la ofrenda, el sacrificio perpetuo, el sacrificio de los días de reposo, de las nuevas lunas y de las fiestas solemnes, y las cosas santificadas y las ofrendas voluntarias para hacer expiación por Israel”. Estas ofrendas no solo sirvieron para la adoración, sino también para el sostenimiento del ministerio y la ayuda a los necesitados.
Queridos hermanos y hermanas, las ofrendas son una parte esencial de nuestra vida cristiana. Nos permiten expresar nuestra gratitud, confiar en Dios como nuestro proveedor y participar en su obra en la tierra. No importa cuánto puedas ofrecer, lo importante es hacerlo con un corazón generoso y alegre. Dios ve nuestras ofrendas y las bendice abundantemente.
En conclusión, recordemos siempre la importancia de las ofrendas en nuestra relación con Dios. No se trata solo de lo que damos, sino de cómo lo damos y con qué actitud. Que nuestras ofrendas sean un reflejo de nuestro amor y gratitud hacia nuestro Señor, y que seamos bendecidos en abundancia por su fidelidad y generosidad.
Texto Bíblico Sobre Las Ofrendas.
¡Dios les bendiga abundantemente!
Texto Bíblico Sobre Las Ofrendas.