Texto Bíblico de la Obediencia
¡Saludos, amados hermanos y hermanas en Cristo! Hoy quiero compartir con ustedes una palabra poderosa y transformadora: el Texto Bíblico de la Obediencia. La obediencia es un tema recurrente en las Sagradas Escrituras y nos muestra la importancia que tiene para nuestra relación con Dios y nuestro crecimiento espiritual.
La obediencia no es solo cumplir con reglas y normas religiosas, sino que implica una actitud de sumisión y reverencia hacia nuestro Creador. En el libro de Deuteronomio 11:26-28, leemos: «Miren, hoy les pongo delante una bendición y una maldición: la bendición, si obedecen los mandamientos del Señor su Dios que yo les estoy ordenando hoy; y la maldición, si no obedecen los mandamientos del Señor su Dios, sino que se desvían del camino que hoy les ordeno, y siguen a otros dioses que no conocieron». Esta declaración deja en claro que la obediencia a Dios trae bendición, mientras que la desobediencia trae consecuencias negativas.
La obediencia también está ligada a nuestro amor por Dios. En Juan 14:15, Jesús nos dice: «Si me aman, obedecerán mis mandamientos». Nuestro amor por Dios se demuestra en nuestra obediencia a Su Palabra. No podemos afirmar que amamos a Dios y al mismo tiempo desobedecerlo. Nuestra obediencia es una expresión de gratitud y reverencia hacia aquel que nos amó primero.
Además, la obediencia nos protege de los peligros y engaños del mundo. En Proverbios 3:5-6 encontramos estas palabras sabias: «Confía en el Señor de todo corazón, y no en tu propia inteligencia. Reconócelo en todos tus caminos, y él allanará tus sendas». Cuando obedecemos a Dios, estamos tomando la decisión de confiar en Él y en Sus caminos, en lugar de confiar en nuestras propias habilidades y sabiduría. Dios promete allanar nuestros caminos y guiarnos en cada paso que damos, si le somos obedientes.
La obediencia también es un camino hacia la libertad. En Gálatas 5:13, el apóstol Pablo nos dice: «Ustedes, hermanos, fueron llamados a la libertad; pero no se valgan de esa libertad para dar rienda suelta a sus pasiones. Al contrario, sírvanse unos a otros por amor». A veces podemos pensar que la obediencia limita nuestra libertad, pero en realidad, nos libera de las cadenas del pecado y nos permite vivir en la plenitud de la gracia de Dios. Al obedecer a Dios y servir a los demás, encontramos verdadera libertad y propósito en nuestra vida.
Queridos hermanos y hermanas, la obediencia a Dios es una bendición y un llamado que debemos tomar en serio. A través de la obediencia, demostramos nuestro amor por Dios, nos protegemos de los peligros del mundo, encontramos libertad y vivimos en la plenitud de Su gracia. No se trata solo de seguir reglas y normas, sino de tener una relación íntima con nuestro Padre celestial y buscar Su voluntad en todas las áreas de nuestra vida.
Así que los animo a reflexionar sobre el Texto Bíblico de la Obediencia y a tomar la decisión de ser obedientes a Dios en todo momento. Recordemos las palabras de Jesús en Juan 14:23: «Jesús le respondió: —El que me ama, obedecerá mi palabra; y mi Padre lo amará, y haremos nuestra vivienda en él». Que estas palabras nos inspiren a vivir en obediencia y a experimentar la presencia y el amor de Dios de una manera más profunda.
¡Que la obediencia a Dios sea nuestro mayor anhelo y nuestra más grande satisfacción! Que en cada aspecto de nuestra vida, podamos decir con humildad y reverencia: «Texto Bíblico de la Obediencia, aquí estoy, Señor, para obedecerte y seguir tus caminos». Amén.
Texto Bíblico de la Obediencia