Salmos 37:39: “La salvación de los justos viene de Jehová; él es su fortaleza en el tiempo de angustia.”
Queridos hermanos y hermanas en Cristo,
Hoy nos reunimos para reflexionar sobre la poderosa promesa que encontramos en el Salmo 37:39. Esta declaración nos recuerda que la salvación de los justos proviene únicamente de nuestro amado Señor Jehová. Él es nuestra fortaleza en momentos de angustia, y en Él encontramos la verdadera paz y seguridad.
En este mundo lleno de desafíos y dificultades, a menudo nos encontramos enfrentando situaciones que nos sobrepasan. Problemas familiares, enfermedades, conflictos laborales y luchas emocionales pueden amenazar nuestra fe y hacernos sentir débiles. Sin embargo, debemos recordar que Dios es nuestro refugio y nuestra fuerza en medio de todas las tormentas de la vida.
Cuando enfrentamos tiempos de angustia, es natural que busquemos soluciones en nuestras propias fuerzas y sabiduría. Pero este Salmo nos recuerda que debemos confiar plenamente en el Señor, quien tiene poder para salvar y proteger a aquellos que son justos delante de Él. No importa cuán grandes sean nuestras luchas, Dios siempre está dispuesto a extendernos Su amor, gracia y misericordia.
En Salmos 37:39, se nos dice que Dios es nuestra fortaleza en el tiempo de angustia. Esto significa que, cuando enfrentamos dificultades, no debemos confiar en nuestras propias habilidades o en las soluciones del mundo, sino en la fortaleza y poder de Dios. Él es el único que puede brindarnos la paz y la fuerza necesarias para superar cualquier adversidad.
Cuando nos encontramos en el tiempo de angustia, debemos recordar que Dios está siempre cerca, listo para extendernos Su amor y apoyo. Él conoce nuestras luchas y nuestras debilidades, y está dispuesto a extendernos Su mano para levantarnos. No importa cuán desesperada pueda parecer nuestra situación, Dios tiene el poder para cambiar nuestras circunstancias y guiarnos por el camino de la victoria.
Además, este versículo nos recuerda que la salvación viene de Jehová. No podemos salvarnos a nosotros mismos ni encontrar la verdadera paz y seguridad en las cosas materiales o en las soluciones temporales. Solo a través de una relación personal con Dios podemos experimentar la verdadera salvación y encontrar la paz que trasciende todo entendimiento.
Así que, hermanos y hermanas, no importa cuán difícil sea tu situación en este momento, te animo a que confíes en el Señor con todo tu corazón. Él es tu fortaleza en el tiempo de angustia y tiene el poder para cambiar tu situación. No permitas que el miedo o la desesperanza te paralicen, sino busca refugio en el amor y el poder de Dios.
Recuerda que la salvación viene de Jehová. Él te ha llamado a vivir una vida justa y en comunión con Él. Confía en Su amor y gracia, y Él te sostendrá en todo momento. No importa cuántas veces caigas, Él siempre estará allí para levantarte y guiarte por el camino de la victoria.
En conclusión, hermanos y hermanas, recordemos siempre las palabras del Salmo 37:39: “La salvación de los justos viene de Jehová; él es su fortaleza en el tiempo de angustia.” Confía en el Señor en todo momento, y Él te sostendrá y te guiará en medio de cualquier adversidad. Que esta poderosa promesa sea una fuente de inspiración y fortaleza en tu vida. Amén.
Salmos 37:39: “La salvación de los justos viene de Jehová; él es su fortaleza en el tiempo de angustia.”
Salmos 37:39: “La salvación de los justos viene de Jehová; él es su fortaleza en el tiempo de angustia.”
¡Confía en el Señor y encuentra tu fortaleza en Él!