Salmo 91:10 – Un Refugio Inquebrantable
Salmo 91:10 Reina Valera: «No te sobrevendrá mal, ni plaga tocará tu morada.»
Hay momentos en la vida donde nos sentimos rodeados de peligros y amenazas. Nos enfrentamos a situaciones que nos causan ansiedad y temor. Sin embargo, como creyentes, tenemos la promesa de un refugio inquebrantable en el Salmo 91:10.
¿Qué significa esto? Significa que no importa cuán difícil sea la situación en la que nos encontremos, Dios está con nosotros y nos protegerá. No importa cuánto mal o plaga pueda rodearnos, no nos alcanzará. Nuestro hogar, nuestro refugio, será preservado por la mano poderosa de Dios.
En la sociedad actual, enfrentamos muchos peligros y amenazas. Desde enfermedades mortales hasta desastres naturales, desde violencia hasta incertidumbre económica. Parece que en cada esquina hay algo que nos amenaza y nos causa dolor. Pero en medio de todo eso, podemos aferrarnos a la promesa de Salmo 91:10.
Dios nos invita a confiar en Él y en Su protección. Él nos asegura que no seremos sobrepasados por el mal. No importa cuál sea nuestra situación, Dios es más grande y más poderoso que cualquier amenaza que enfrentemos. Él es nuestro refugio seguro, donde podemos encontrar paz y seguridad.
En momentos de crisis, es fácil perder la esperanza y permitir que el miedo nos domine. Pero el Salmo 91:10 nos recuerda que no estamos solos, que tenemos un Dios que está a nuestro lado en todo momento. Él nos protege y nos guarda de toda plaga que pueda tocar nuestra morada.
Nuestra fe en Dios nos da la confianza para enfrentar cualquier situación con valentía y determinación. No importa cuán grande sea el problema, podemos descansar en la promesa de Salmo 91:10 y saber que Dios está obrando en nuestro favor. Él es nuestro escudo y nuestra fortaleza, y nada puede vencerlo.
Dios no promete que no enfrentaremos dificultades o pruebas en esta vida. Pero sí promete estar con nosotros en medio de ellas y protegernos de cualquier mal que pueda intentar tocarnos. Su poder y amor son inquebrantables, y podemos confiar en Él en todo momento.
Cuando nos encontramos en situaciones difíciles, no debemos permitir que el miedo nos paralice. En lugar de eso, debemos recordar la promesa de Salmo 91:10 y declararla con confianza. No importa cuán oscura sea la tormenta, Dios es nuestro refugio seguro.
Así que, independientemente de lo que estés enfrentando hoy, te animo a recordar y aferrarte a la promesa de Salmo 91:10. Confía en que Dios está contigo, que te protegerá y que nunca te abandonará. Él es tu refugio inquebrantable, tu salvador y amigo fiel.
En conclusión, Salmo 91:10 nos recuerda que no importa cuán grande sea el mal o la plaga que nos rodee, Dios es más grande y más poderoso. Él es nuestro refugio seguro y nos protegerá en todo momento. Así que, confía en Él y declara Su promesa con valentía. No importa cuán difícil sea la situación, Dios está contigo y te mantendrá a salvo. Salmo 91:10 – «No te sobrevendrá mal, ni plaga tocará tu morada.»
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