Salmos 9:9 – “Y será Jehová refugio del pobre, refugio para el tiempo de angustia.”
Queridos hermanos y hermanas en Cristo, hoy nos encontramos reunidos para reflexionar sobre la maravillosa promesa que nos ofrece el Salmo 9:9. En este versículo, el salmista nos asegura que Jehová será nuestro refugio en tiempos de angustia, especialmente para aquellos que son pobres y necesitados.
En nuestra vida cotidiana, enfrentamos diversos desafíos y pruebas que pueden llevarnos a sentirnos desamparados y abrumados. La angustia puede apoderarse de nuestros corazones y hacer que dudemos de la presencia y el cuidado de Dios en medio de nuestras dificultades. Sin embargo, el Salmo 9:9 nos recuerda que Dios es el refugio del pobre, aquellos que reconocen su necesidad y dependencia absoluta de Él.
Cuando el salmista habla de “pobre”, no se refiere solo a la falta de recursos materiales, sino también a aquellos que son humildes de espíritu y reconocen su necesidad de Dios. Son aquellos que claman a Dios en medio de su aflicción y encuentran consuelo y fortaleza en Su presencia.
En nuestra sociedad actual, es fácil caer en la trampa de buscar refugio en cosas materiales o en nuestras propias fuerzas. Pero el Salmo 9:9 nos llama a recordar que solo en Dios encontraremos un refugio verdadero y duradero. Él es el único que puede brindarnos paz y seguridad en medio de las tormentas de la vida.
Cuando enfrentamos momentos de angustia y adversidad, es esencial acudir a Dios en oración y buscar refugio en Su presencia. Él es nuestro amparo y fortaleza, nuestro pronto auxilio en las tribulaciones (Salmo 46:1). No importa cuán difícil parezca la situación, podemos confiar en que Dios estará allí para sostenernos y guiarnos.
Además, el Salmo 9:9 nos enseña que Dios es un refugio en el tiempo de angustia. Esto implica que Él no solo nos provee de protección y consuelo, sino que también está presente en medio de nuestras dificultades. No estamos solos en nuestras luchas, porque Dios está con nosotros, caminando a nuestro lado y fortaleciéndonos.
Cuando experimentamos tiempos de angustia, podemos encontrar consuelo en las palabras del profeta Isaías: “Cuando pases por las aguas, yo estaré contigo; y si por los ríos, no te anegarán. Cuando pases por el fuego, no te quemarás, ni la llama arderá en ti” (Isaías 43:2). Dios nunca nos abandona en medio de nuestras pruebas, sino que nos sostiene y nos guarda.
En conclusión, el Salmo 9:9 nos anima a confiar en Dios como nuestro refugio en tiempos de angustia. No importa cuán grande sea la tormenta que enfrentemos, Él es nuestro amparo y fortaleza. Podemos acudir a Él en oración y buscar Su presencia, sabiendo que Él nos sostendrá y nos brindará consuelo en medio de nuestras dificultades.
Así que, queridos hermanos y hermanas, no importa cuán desesperanzados o desamparados nos sintamos, recordemos las palabras del Salmo 9:9: “Y será Jehová refugio del pobre, refugio para el tiempo de angustia”. Confíemos en que Dios está con nosotros en todo momento y que Él nos sostendrá y fortalecerá. Busquemos Su presencia y permitamos que Él nos guíe en cada paso de nuestro camino.
Que estas palabras del Salmo 9:9 encuentren un lugar especial en nuestros corazones y nos inspiren a buscar refugio en Dios en todo momento. ¡Que la paz y el consuelo de Dios sean nuestro refugio en medio de las tormentas de la vida!
Salmos 9:9 – “Y será Jehová refugio del pobre, refugio para el tiempo de angustia.”
Amén y amén.
Salmos 9:9 – “Y será Jehová refugio del pobre, refugio para el tiempo de angustia.”