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Refugio en Dios: Salmo 71:9 revela su poder


Salmo 71:9 – La Esperanza en Dios en Todas las Etapas de la Vida

En la vida, atravesamos diferentes etapas y enfrentamos diversas situaciones que nos pueden llenar de dudas, temores y preocupaciones. A veces, sentimos que nuestras fuerzas flaquean y que no podemos seguir adelante. Sin embargo, el Salmo 71:9 nos ofrece una poderosa promesa y un recordatorio de dónde encontrar nuestra verdadera esperanza en todas las etapas de la vida.

Salmo 71:9 (Reina Valera): «No me deseches en el tiempo de la vejez; cuando mi fuerza se acabare, no me desampares.»

Este versículo nos muestra la profunda confianza y dependencia que el salmista tiene en Dios. Él reconoce que, a medida que envejece, sus fuerzas se debilitarán, pero aún así, clama a Dios para que no lo desampare. Esto nos enseña que, sin importar nuestra edad o situación, podemos encontrar consuelo y protección en el Señor.

Cuando somos jóvenes, podemos sentirnos llenos de energía y vitalidad, con un futuro lleno de promesas por delante. Pero la vida no siempre es fácil y, a medida que avanzamos en edad, enfrentamos desafíos y dificultades que pueden hacer que nuestra fuerza física y mental disminuya.

Sin embargo, el Salmo 71:9 nos recuerda que Dios no nos desecha ni nos abandona en ninguna etapa de nuestra vida. Él está presente en cada momento, dispuesto a fortalecernos y sostenerte en nuestras debilidades. No importa cuán viejos o débiles nos sintamos, Dios está allí para sostenernos y guiarnos.

Es en estos momentos de debilidad que nuestra fe se pone a prueba y podemos experimentar el poder y la fidelidad de Dios de una manera más profunda. Cuando nuestras fuerzas flaquean, Dios se hace fuerte en nosotros. Él nos ofrece consuelo, dirección y esperanza renovada para seguir adelante.

Al reflexionar sobre el Salmo 71:9, recordemos que no importa cuál sea nuestra situación actual, Dios es nuestro refugio y fortaleza. Él nos sustenta y nos da la fuerza que necesitamos para enfrentar cada día.

Cuando sentimos que nuestras fuerzas se agotan y que no podemos continuar, debemos recordar que Dios es nuestro apoyo y nuestra fortaleza. Él nos capacita para superar cualquier obstáculo y nos da la esperanza necesaria para perseverar.

En medio de la incertidumbre y las dificultades de la vida, podemos confiar en la promesa del Salmo 71:9. Dios nunca nos desamparará ni nos abandonará. Él está con nosotros en cada paso del camino, brindándonos su amor y cuidado incondicional.

Así que, no importa cuán jóvenes o mayores seamos, encontremos consuelo y confianza en Dios. Él nos sostendrá en nuestras debilidades y nos dará la fuerza necesaria para seguir adelante. Confíemos en su fidelidad y en su amor inagotable.

En conclusión, el Salmo 71:9 nos recuerda que, sin importar nuestra edad o situación, podemos encontrar esperanza y fortaleza en Dios. Él nunca nos desamparará ni nos abandonará. Que esta promesa nos inspire a confiar en el Señor en todas las etapas de nuestra vida, sabiendo que Él es nuestro refugio y nuestra fortaleza.

Salmo 71:9 (Reina Valera): «No me deseches en el tiempo de la vejez; cuando mi fuerza se acabare, no me desampares.»

Que esta poderosa promesa de Dios nos guíe y nos dé paz en cada paso del camino. No importa cuán débiles nos sintamos, Dios está con nosotros. Confíemos en Él y en su amor inagotable para encontrar esperanza y fortaleza en todas las etapas de nuestra vida.

Salmo 71:9 (Reina Valera): «No me deseches en el tiempo de la vejez; cuando mi fuerza se acabare, no me desampares.»