Salmo 43:1 – «Hazme justicia, oh Dios, y defiende mi causa contra gente impía; líbrame de los hombres engañadores y perversos.»
Queridos hermanos y hermanas en Cristo, hoy quiero compartir con ustedes un pasaje poderoso y alentador de la Palabra de Dios. El Salmo 43, versículo 1, nos invita a clamar a nuestro Señor en busca de justicia y protección contra aquellos que nos engañan y actúan de manera perversa.
En nuestra vida diaria, nos encontramos con situaciones en las que la injusticia parece prevalecer. Nos enfrentamos a personas que, con malas intenciones, tratan de perjudicarnos o engañarnos. En momentos como estos, es fácil sentirnos desesperanzados y abandonados. Sin embargo, el Salmo 43:1 nos recuerda que tenemos un Dios justo y defensor de nuestra causa.
Cuando nos enfrentamos a la maldad y la injusticia, no debemos olvidar que Dios está de nuestro lado. Él es nuestro refugio y fortaleza en tiempos de dificultad. Podemos confiar plenamente en que Él nos librará de aquellos que nos causan daño y nos protegerá de los engaños de la gente perversa.
Es importante entender que la búsqueda de justicia no significa buscar venganza o hacer daño a aquellos que nos han perjudicado. Nuestro Señor nos llama a mantener nuestros corazones llenos de amor y perdón, incluso hacia nuestros enemigos. Sin embargo, esto no significa que debamos permitir que la injusticia prevalezca. Debemos orar y buscar la intervención divina para que se haga justicia y se restablezca el equilibrio en nuestras vidas.
Cuando clamamos a Dios en busca de justicia, nos mostramos humildes y reconocemos que no podemos enfrentar los desafíos de la vida por nuestra cuenta. Le entregamos nuestras cargas y confiamos en que Él obrará en nuestro favor. Nuestro Dios es un Dios de justicia y misericordia. Él conoce nuestras necesidades y escucha nuestras oraciones.
Además de buscar justicia, el Salmo 43:1 nos invita a clamar a Dios para que defienda nuestra causa. Esto implica que le entreguemos nuestras luchas y dificultades, confiando en que Él luchará por nosotros. No importa cuán grande sea el problema o cuán difícil parezca la situación, nuestro Dios es más grande y poderoso. Él peleará nuestras batallas y nos defenderá de aquellos que nos atacan.
Queridos hermanos y hermanas, cuando leemos el Salmo 43:1, encontramos consuelo y esperanza en medio de las adversidades. Sabemos que no estamos solos y que nuestro Dios está a nuestro lado, listo para actuar en nuestro favor. No importa cuál sea la situación que enfrentemos, podemos confiar en que Dios nos hará justicia y nos defenderá.
Así que, hoy los invito a unirse a mí en clamar a nuestro Señor y entregarle nuestras cargas. Oremos juntos para que Dios haga justicia en nuestras vidas y en el mundo que nos rodea. Confíemos en que Él nos librará de los engaños, nos protegerá de la maldad y nos brindará su amor y misericordia.
«Hazme justicia, oh Dios, y defiende mi causa contra gente impía; líbrame de los hombres engañadores y perversos.»
Que esta poderosa oración del Salmo 43:1 sea nuestra guía y fuente de inspiración en momentos de dificultad. Confíen en que Dios obrará en sus vidas y les concederá la justicia y protección que necesitan. No teman, hermanos y hermanas, porque nuestro Dios es fiel y está siempre dispuesto a escuchar nuestras oraciones.
¡Que la paz y la gracia de nuestro Señor Jesucristo estén con todos ustedes!
Salmo 43:1 – «Hazme justicia, oh Dios, y defiende mi causa contra gente impía; líbrame de los hombres engañadores y perversos.»