Salmo 1 Nvi: El Camino de la Bendición
¡Saludos, amados hermanos y hermanas en Cristo! Hoy quiero compartir con ustedes el maravilloso mensaje del Salmo 1 Nvi, una porción de las Sagradas Escrituras que nos brinda sabiduría y guía para vivir una vida bendecida por Dios. Este salmo nos muestra claramente el camino que debemos seguir para experimentar la plenitud de las bendiciones divinas en nuestras vidas.
El Salmo 1 Nvi comienza con estas hermosas palabras: «Dichoso el hombre que no sigue el consejo de los malvados, ni se detiene en la senda de los pecadores ni cultiva la amistad de los blasfemos» (Salmo 1:1, NVI). Aquí se nos presenta una elección fundamental que debemos hacer en nuestra vida diaria. Debemos apartarnos de las malas influencias y de aquellos que se alejan de los caminos de Dios. En cambio, debemos buscar la compañía y el consejo de aquellos que aman y temen al Señor.
Nuestro Dios es un Dios de amor y misericordia, y desea lo mejor para nosotros. Por eso, en el Salmo 1 Nvi se nos dice: «Antes bien, su delicia está en la ley del Señor, y día y noche medita en ella» (Salmo 1:2, NVI). La Palabra de Dios es nuestro manual de vida, y debemos deleitarnos en ella y meditar en ella constantemente. A través de la lectura y estudio diario de la Biblia, encontraremos dirección y sabiduría para enfrentar los desafíos y decisiones que se nos presentan en nuestra jornada.
El Salmo 1 Nvi continúa diciendo: «Será como un árbol plantado a la orilla de un río que, cuando llega su tiempo, da fruto y sus hojas jamás se marchitan. ¡Todo lo que haga prosperará!» (Salmo 1:3, NVI). Esta maravillosa imagen nos muestra cómo el hombre que camina en los caminos de Dios será bendecido abundantemente. Seremos como esos árboles que están firmemente arraigados en la tierra, recibiendo continuamente el sustento del río de la vida que es nuestro Señor.
Cuando seguimos los mandamientos y los designios de Dios, nuestras vidas se vuelven fructíferas y prósperas. Nuestros frutos serán buenos y nuestras hojas siempre estarán verdes, reflejando así la vida y el amor de Cristo en nosotros. Además, Dios promete que todo lo que hagamos prosperará. Esto no significa que no enfrentaremos desafíos o dificultades, pero sí significa que Dios estará con nosotros en cada paso del camino, dándonos fuerzas y bendiciones para superar cualquier obstáculo.
Amados hermanos y hermanas, el Salmo 1 Nvi nos muestra claramente el camino de la bendición. Debemos apartarnos de las malas influencias y buscar la compañía de aquellos que aman y honran al Señor. Debemos deleitarnos en su Palabra y meditar en ella día y noche. Debemos seguir los mandamientos y los designios de Dios, confiando en que Él nos guiará y bendecirá abundantemente.
Al finalizar, quiero recordarles una vez más las palabras del Salmo 1 Nvi: «Será como un árbol plantado a la orilla de un río que, cuando llega su tiempo, da fruto y sus hojas jamás se marchitan. ¡Todo lo que haga prosperará!» (Salmo 1:3, NVI). Que estas palabras sean un recordatorio constante en nuestras vidas, de que aquellos que siguen los caminos de Dios serán bendecidos abundantemente.
Que Dios los bendiga y les conceda la sabiduría y el discernimiento para seguir el camino de la bendición. Amen.
Salmo 1 Nvi:
1 Dichoso el hombre que no sigue el consejo de los malvados, ni se detiene en la senda de los pecadores ni cultiva la amistad de los blasfemos,
2 sino que en la ley del Señor se deleita, y día y noche medita en ella.
3 Será como un árbol plantado a la orilla de un río que, cuando llega su tiempo, da fruto y sus hojas jamás se marchitan. ¡Todo lo que haga prosperará!