Salmo 118.8: «Mejor es confiar en Jehová que confiar en el hombre.»
Queridos hermanos y hermanas en Cristo, hoy quiero compartir con ustedes un pasaje de la Palabra de Dios que nos brinda una gran inspiración y revelación: Salmo 118.8. Este versículo es una poderosa declaración que nos recuerda la importancia de poner nuestra confianza en el Señor en lugar de confiar en los seres humanos.
Vivimos en un mundo donde la confianza en las personas a menudo es frágil y decepcionante. Incluso aquellos que amamos y en quienes confiamos pueden fallarnos en algún momento. Pero en medio de todas estas situaciones, el Salmo 118.8 nos anima a depositar nuestra confianza en Dios, quien nunca nos defraudará.
Nuestro Dios es digno de confianza. Él es fiel y siempre cumple sus promesas. A lo largo de la historia, podemos ver cómo Dios ha sido fiel a su pueblo, desde los tiempos de Abraham hasta nuestros días. Él nunca ha dejado de cumplir su palabra y siempre ha estado allí para protegernos y guiarnos.
Cuando confiamos en Dios, estamos reconociendo que Él es nuestro refugio y fortaleza. A diferencia de los seres humanos, Dios es eterno y omnipotente. No hay nada imposible para Él. Cuando enfrentamos dificultades o desafíos en nuestra vida, podemos acudir a Él en busca de ayuda y consuelo. Él nos escucha y nos sostiene en sus brazos amorosos.
En momentos de incertidumbre, el Salmo 118.8 nos recuerda que Dios es nuestro ancla. Cuando todo parece estar en contra nuestra, podemos confiar en que Él está trabajando en nuestro favor. Su plan para nuestras vidas es perfecto, incluso cuando no entendemos lo que está sucediendo a nuestro alrededor. Podemos descansar en la certeza de que nuestro Dios es bueno y tiene el control de todas las cosas.
La confianza en Dios no significa que no enfrentaremos dificultades o pruebas en la vida. Sin embargo, cuando confiamos en Él, sabemos que no estamos solos. Salmo 118.8 nos asegura que Jehová está con nosotros, fortaleciéndonos y guiándonos en cada paso del camino.
Hermanos y hermanas, hoy los animo a aferrarse a la verdad de Salmo 118.8. No importa cuán desalentadoras sean las circunstancias que estés enfrentando en este momento, recuerda que Dios es tu roca y tu salvación. Él es quien te sostiene y te dará la fuerza que necesitas para superar cualquier obstáculo.
Cuando depositamos nuestra confianza en el Señor, experimentamos una paz que trasciende todo entendimiento. No importa cuán oscuro sea el valle en el que te encuentres, Él te guiará hacia la luz. Él es tu pastor y nada te faltará.
En conclusión, queridos hermanos y hermanas, Salmo 118.8 es una poderosa declaración de fe y confianza en Dios. Nos recuerda que Él es digno de nuestra confianza y que siempre cumplirá sus promesas. No importa cuán incierta sea la vida, podemos confiar en que Él está con nosotros, fortaleciéndonos y guiándonos en cada paso del camino.
Así que hoy te animo a poner tu confianza en el Señor. No confíes en las palabras de los hombres o en las circunstancias que te rodean, sino en el Dios que es eterno y fiel. Él es tu refugio y fortaleza. Confía en Él y verás cómo transforma tu vida para bien.
Salmo 118.8: «Mejor es confiar en Jehová que confiar en el hombre.»
¡Que Dios los bendiga abundantemente!