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Salmo 124 Reina Valera: Un canto de confianza y protección divina


Salmo 124 Reina Valera – ¡Nuestra ayuda viene de Jehová!

Salmo 124 Reina Valera: «Si no hubiera estado Jehová por nosotros, Diga ahora Israel; Si no hubiera estado Jehová por nosotros, Cuando se levantaron contra nosotros los hombres, Nos habrían vivos tragado, Cuando se encendió su furor contra nosotros; Las aguas nos habrían anegado, Y el torrente habría pasado sobre nuestra alma; Las aguas impetuosas habrían pasado sobre nuestra alma. Bendito Jehová, Que no nos dio como presa a los dientes de ellos. Nuestra alma escapó cual ave del lazo de los cazadores; Se rompió el lazo, y escapamos nosotros. Nuestra ayuda está en el nombre de Jehová, Que hizo el cielo y la tierra.»

Mis amados hermanos y hermanas en Cristo, hoy quiero compartir con ustedes la inspiradora Palabra de Dios que encontramos en el Salmo 124 de la Reina Valera. Este salmo nos recuerda que nuestra ayuda proviene únicamente de Jehová, nuestro Dios poderoso y misericordioso.

En la vida, a menudo enfrentamos situaciones difíciles y desafiantes. Nos encontramos con adversidades que parecen insuperables y nos sentimos abrumados por las circunstancias. Pero en medio de todo esto, el Salmo 124 nos recuerda que Dios está con nosotros, listo para extendernos Su mano de salvación y liberación.

El salmista comienza diciendo: «Si no hubiera estado Jehová por nosotros, Diga ahora Israel; Si no hubiera estado Jehová por nosotros, Cuando se levantaron contra nosotros los hombres…» (Salmo 124:1-2). Estas palabras nos enseñan que, sin la intervención divina, estaríamos perdidos. Es Dios quien nos protege y nos guarda de aquellos que se levantan en nuestra contra. Él es nuestra fortaleza y nuestra defensa en tiempos de adversidad.

Continuando, el salmo declara: «Bendito Jehová, Que no nos dio como presa a los dientes de ellos» (Salmo 124:6). Esto nos recuerda que Dios no permite que seamos devorados por nuestros enemigos. Él tiene el control absoluto sobre todas las circunstancias y siempre nos guarda de todo mal. ¡Cuán maravilloso es saber que tenemos un Dios que nos protege y nos libra del peligro!

El salmista también nos habla de cómo nuestra alma escapa como un ave del lazo de los cazadores: «Nuestra alma escapó cual ave del lazo de los cazadores; Se rompió el lazo, y escapamos nosotros» (Salmo 124:7). Esta imagen es tan poderosa, ya que nos muestra que Dios nos libera de las trampas del enemigo. Él nos da la victoria sobre todas las artimañas del diablo y nos permite escapar de cualquier situación que intente atraparnos.

En el último verso del Salmo 124, encontramos una declaración de fe y confianza absoluta en Dios: «Nuestra ayuda está en el nombre de Jehová, Que hizo el cielo y la tierra» (Salmo 124:8). Aquí, el salmista nos recuerda que nuestra ayuda proviene del nombre de Jehová, el Creador de los cielos y la tierra. Él es el Dios todopoderoso que tiene el poder de transformar nuestras vidas y cambiar cualquier situación desfavorable en una bendición.

Mis amados hermanos y hermanas, hoy los invito a reflexionar en el Salmo 124 de la Reina Valera. Que estas palabras sean un recordatorio constante de que nuestra ayuda viene de Jehová. No importa cuán grandes sean nuestros problemas o cuán poderosos sean nuestros enemigos, Dios está con nosotros y nos llevará a la victoria.

En momentos de dificultad, invoquemos el nombre de Jehová y confiemos en Su poder y fidelidad. Él es nuestro refugio y fortaleza en tiempos de tormenta. No hay nada imposible para nuestro Dios y Él nos sostendrá en Sus manos amorosas.

Así que, amados hermanos y hermanas, cuando enfrenten desafíos en su vida, recuerden el Salmo 124 de la Reina Valera. Que estas palabras inspiren y fortalezcan su fe en Dios. Él es nuestro escudo protector y nos guiará en cada paso del camino.

Nuestra ayuda viene de Jehová. ¡Gloria y honra al nombre de nuestro Dios!