Salmo 24:10 – «¿Quién es este Rey de gloria? Jehová de los ejércitos, él es el Rey de la gloria.» (Reina Valera)
Queridos hermanos y hermanas en Cristo,
Hoy quiero compartir con ustedes una poderosa promesa que se encuentra en el Salmo 24:10. En este versículo, el salmista nos hace una pregunta que resuena en lo más profundo de nuestros corazones: «¿Quién es este Rey de gloria?»
En nuestro caminar con Dios, es esencial reconocer y afirmar quién es nuestro Rey de gloria. No es otro más que Jehová de los ejércitos, el Todopoderoso, el Creador de los cielos y la tierra. Él es el Rey supremo, el gobernante sobre todo el universo. No hay nadie como Él, y Su gloria es incomparable.
Cuando reflexionamos sobre esta verdad, nos llena de asombro y reverencia. Nos damos cuenta de que somos parte de un plan divino mucho más grande de lo que podemos comprender. El Rey de gloria nos ha escogido y nos ha llamado a vivir una vida que le glorifique.
En nuestra vida cotidiana, a menudo nos enfrentamos a desafíos y obstáculos que parecen insuperables. Nos sentimos débiles y desanimados, y nos preguntamos cómo podemos seguir adelante. Pero en medio de nuestras luchas, debemos recordar que tenemos un Rey de gloria a nuestro lado.
Cuando nos encontramos en situaciones aparentemente imposibles, debemos recordar que Jehová de los ejércitos está con nosotros. Él es el Dios de los imposibles, el que hace camino en el desierto y ríos en la soledad. No importa cuán oscuro sea el valle en el que nos encontremos, Él es nuestra luz y nuestra fortaleza.
Nuestro Rey de gloria tiene el poder de transformar nuestras debilidades en fortalezas. Él nos capacita y nos equipa para enfrentar cualquier desafío que se presente en nuestro camino. No importa cuán grande sea la montaña que debamos escalar, Él nos dará la fuerza y la sabiduría para conquistarla.
Además, debemos recordar que somos hijos e hijas de un Rey de gloria. Esto significa que llevamos Su imagen y Su sello en nuestro interior. Somos Sus embajadores en este mundo, llamados a reflejar Su gloria y Su amor a todos los que nos rodean.
Al vivir nuestras vidas como seguidores de Cristo, debemos preguntarnos constantemente: ¿Cómo puedo glorificar a mi Rey de gloria en todo lo que hago? ¿Cómo puedo ser Su luz en medio de la oscuridad? ¿Cómo puedo demostrar Su amor y gracia a los demás?
Cuando nos rendimos a la autoridad y el gobierno de nuestro Rey de gloria, experimentamos una paz y una alegría que trascienden cualquier circunstancia. No importa lo que estemos enfrentando, Él nos fortalecerá y nos sostendrá.
Hermanos y hermanas, que este Salmo 24:10 sea un recordatorio constante en nuestras vidas. En momentos de duda, recordemos que tenemos un Rey de gloria que está a nuestro lado. En momentos de temor, recordemos que Él es nuestro refugio y fortaleza. En momentos de alegría, recordemos que Él es digno de toda nuestra adoración.
Que nuestras vidas sean un testimonio vivo de la gloria y el poder de nuestro Rey. Que cada paso que demos y cada palabra que hablemos refleje Su amor y gracia. Y que, al final de nuestros días, podamos decir con convicción: «Jehová de los ejércitos, él es el Rey de la gloria.»
Amados hermanos y hermanas, que Dios les bendiga y les guarde siempre.
Salmo 24:10 – «¿Quién es este Rey de gloria? Jehová de los ejércitos, él es el Rey de la gloria.» (Reina Valera)