Salmo 34.19: «Muchas son las aflicciones del justo, pero de todas ellas le librará Jehová.»
Queridos hermanos y hermanas en Cristo, hoy quiero compartir con ustedes una poderosa promesa que se encuentra en el Salmo 34.19. Este versículo nos recuerda que aunque como creyentes podemos enfrentar diversas aflicciones en la vida, nuestro Dios fiel y amoroso siempre estará a nuestro lado para librarnos de ellas.
En este mundo caído, no estamos exentos de problemas y dificultades. A veces, nos encontramos en situaciones donde pareciera que todo está en contra nuestra. Podemos enfrentar enfermedades, pérdidas, conflictos familiares o laborales, y muchas otras circunstancias que nos causan dolor y sufrimiento. Sin embargo, la Palabra de Dios nos asegura que el justo no será abandonado en medio de estas pruebas.
Cuando el salmista escribe «Muchas son las aflicciones del justo», nos está recordando que ninguna persona está exenta de enfrentar dificultades. Incluso aquellos que buscan vivir una vida justa y recta en el temor de Dios pueden pasar por momentos difíciles. Sin embargo, la segunda parte del versículo nos llena de esperanza y consuelo: «pero de todas ellas le librará Jehová».
¡Qué hermosa promesa! Nuestro Dios no solo está consciente de las aflicciones que enfrentamos, sino que también tiene el poder y la voluntad de librarnos de ellas. No importa cuán grande o desafiante sea nuestra situación, Dios es capaz de intervenir y traer liberación a nuestras vidas.
Es importante destacar que la promesa no dice que seremos exentos de las aflicciones, sino que seremos librados de ellas. Esto significa que Dios no siempre nos quitará las dificultades de inmediato, pero nos dará la fortaleza y la guía necesarias para atravesarlas. A veces, Dios utiliza las pruebas para pulir nuestro carácter, fortalecer nuestra fe y enseñarnos valiosas lecciones.
El Salmo 34.19 nos invita a confiar plenamente en el Señor en medio de nuestras aflicciones. No importa cuán oscuro sea nuestro camino, podemos estar seguros de que Dios está con nosotros. Él nos sostendrá, nos fortalecerá y nos guiará a través de cada dificultad.
Cuando enfrentemos aflicciones, no debemos permitir que el miedo, la ansiedad o la desesperanza nos dominen. En cambio, debemos aferrarnos a la promesa de Dios y recordar que Él es nuestro refugio y nuestra fortaleza en momentos de angustia. Podemos acudir a Él en oración, confiando en que nos escucha y responderá según su perfecta voluntad.
Hermanos y hermanas, no importa cuál sea la aflicción que estés enfrentando en este momento, quiero animarte a aferrarte a la promesa de Salmo 34.19. No importa cuán grande sea el problema, recuerda que Dios es más grande. Él tiene el control de todas las cosas y nada está fuera de su alcance.
En conclusion, el Salmo 34.19 nos recuerda que aunque como creyentes podemos enfrentar muchas aflicciones en la vida, nuestro Dios fiel y amoroso siempre estará a nuestro lado para librarnos de ellas. No importa cuán grande sea el problema, podemos confiar en que Dios tiene el poder y la voluntad de intervenir en nuestras vidas. Así que, en medio de las dificultades, recordemos esta promesa y confiemos en que Dios nos sostendrá y nos guiará hasta el final.
Salmo 34.19: «Muchas son las aflicciones del justo, pero de todas ellas le librará Jehová.»