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Salmo 34:18, el bálsamo para los corazones rotos


Salmo 34:18 – El Señor está cerca de los quebrantados de corazón; salva a los de espíritu abatido.

Queridos hermanos y hermanas en Cristo,

Hoy quiero compartir con ustedes una palabra de aliento y esperanza basada en el Salmo 34:18. En estos tiempos difíciles que estamos atravesando, es importante recordar que nuestro Dios está cerca de nosotros, especialmente cuando nos sentimos quebrantados de corazón y abatidos en espíritu.

La vida puede presentarnos desafíos inesperados y momentos de profundo dolor. Todos enfrentamos situaciones en las que nos sentimos solos, desesperados y sin fuerzas para continuar. Sin embargo, el Salmo 34:18 nos recuerda que en medio de nuestras aflicciones, el Señor está a nuestro lado, listo para extendernos su amor y consuelo.

Cuando nuestros corazones están quebrantados, el Señor nos rodea con su amor incondicional. Él comprende nuestras luchas y sufrimientos más profundos, y no nos abandona en medio de ellos. A través de su presencia constante, el Señor nos ofrece sanidad y restauración, incluso en los momentos más oscuros.

Es importante destacar que no estamos solos en nuestras dificultades. El Salmo 34:18 nos asegura que Dios está cerca de los quebrantados de corazón. No importa cuán profundo sea nuestro dolor, el Señor nunca nos deja de lado. Su amor y misericordia son inagotables, y Él está dispuesto a cargar nuestras cargas y consolarnos en todo momento.

Cuando nos encontramos en un estado de ánimo abatido, cuando nuestros espíritus están desanimados, el Señor viene a nuestro rescate. Él nos levanta, nos fortalece y restaura nuestra esperanza. A través de su amor inmenso, el Señor nos muestra que no hay situación que esté más allá de su poder redentor y transformador.

En medio de nuestras dificultades, es crucial recordar que el Señor es nuestra fortaleza y refugio. Él nos invita a depositar nuestras cargas en sus manos, confiando en que Él nos sustentará y nos dará la fuerza para seguir adelante. No importa cuán abatidos estemos, el Señor es capaz de restaurar nuestro espíritu y renovar nuestras fuerzas.

Queridos hermanos y hermanas, en aquellos momentos en que nos sintamos quebrantados de corazón, abatidos y sin esperanza, recordemos las palabras del Salmo 34:18: «El Señor está cerca de los quebrantados de corazón; salva a los de espíritu abatido». No importa cuán difícil sea nuestra situación, el Señor está a nuestro lado, extendiéndonos su amor y gracia.

Así que, hoy les animo a acercarse al Señor en oración, confiando en su amor y misericordia. Permítanle sanar sus corazones quebrantados y restaurar su espíritu abatido. No importa cuán oscuro sea el camino que estén atravesando, confíen en que el Señor es su roca y su salvación.

En conclusión, el Salmo 34:18 nos recuerda que, sin importar las dificultades que enfrentemos, el Señor está cerca de nosotros. Su amor y compasión son inmensurables, y Él está dispuesto a sanar nuestros corazones y restaurar nuestra esperanza. Así que, confiemos en su poder y dejemos que su amor nos guíe en todo momento.

Que el Salmo 34:18 sea un recordatorio constante en nuestras vidas, de que el Señor está cerca de los quebrantados de corazón; salva a los de espíritu abatido. Amén.

Salmo 34:18 – El Señor está cerca de los quebrantados de corazón; salva a los de espíritu abatido.