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Salmo 35: El clamor del justo en la Biblia Católica


Salmo 35 De La Biblia Católica: La esperanza en medio de la adversidad

Salmo 35 De La Biblia Católica: La esperanza en medio de la adversidad

Queridos hermanos y hermanas en Cristo, hoy quiero compartir con ustedes un pasaje de la Biblia que nos brinda consuelo y esperanza en medio de las dificultades que enfrentamos en nuestra vida diaria. El Salmo 35 de la Biblia Católica es un llamado a confiar en Dios y a buscar su justicia cuando nos encontramos rodeados de injusticias y ataques.

Cuando leemos este Salmo, podemos sentir la angustia y la aflicción del salmista. Él clama a Dios para que luche contra aquellos que lo persiguen y para que lo defienda de sus enemigos. En momentos de injusticia y opresión, es natural que busquemos justicia y protección. Sin embargo, el salmista nos muestra que la respuesta no está en nuestras propias manos, sino en las manos de Dios.

El Salmo 35 nos enseña a confiar en que Dios es nuestro defensor y protector. Él es aquel que pelea nuestras batallas y nos libra de las manos de nuestros enemigos. En medio de la adversidad, podemos encontrar consuelo al saber que Dios está a nuestro lado, luchando por nosotros. El versículo 1 del Salmo 35 nos dice: «Pelea, oh Jehová, contra los que me combaten; pelea contra los que me hacen guerra».

Es importante recordar que nuestra lucha no es contra carne y sangre, sino contra las fuerzas espirituales del mal (Efesios 6:12). Nuestros enemigos pueden ser personas, circunstancias o incluso nuestros propios pensamientos negativos. Sin embargo, no debemos temer, porque Dios está con nosotros y nos dará la victoria.

El Salmo 35 también nos muestra la importancia de orar por nuestros enemigos. El salmista intercede por aquellos que lo persiguen, pide a Dios que los confunda y los avergüence. Sin embargo, también reconoce la importancia de la misericordia y el perdón. En el versículo 13, el salmista dice: «Pero yo, cuando ellos enfermaron, me vestí de cilicio; afligí con ayuno mi alma, y mi oración se volvía a mi seno».

La oración es una poderosa herramienta que Dios nos ha dado para acercarnos a Él y para buscar su voluntad en nuestras vidas. A través de la oración, podemos expresar nuestras preocupaciones, nuestros miedos y nuestras esperanzas a Dios. Él está dispuesto a escucharnos y a responder nuestras oraciones según su perfecta voluntad. El versículo 17 nos asegura: «Señor, ¿hasta cuándo verás esto? Rescata mi alma de sus destrucciones, mi vida de los leones».

Queridos hermanos y hermanas, no importa cuál sea la adversidad que enfrentamos en nuestra vida, podemos encontrar esperanza y consuelo en Dios. Él es nuestro refugio y fortaleza en tiempos de angustia. El Salmo 35 de la Biblia Católica nos anima a confiar en Él y a poner nuestras preocupaciones en sus manos.

Al final de este Salmo, el salmista expresa su confianza en la justicia de Dios y en su fidelidad para con los justos. En el versículo 28, dice: «Entonces mi lengua hablará de tu justicia y de tu alabanza todo el día». A pesar de las dificultades y las pruebas, podemos confiar en que Dios es bueno y que cumplirá sus promesas en nuestras vidas.

Queridos hermanos y hermanas, los invito a meditar en el Salmo 35 de la Biblia Católica. Que este pasaje nos inspire a confiar en Dios en medio de la adversidad y a buscar su justicia en todas las circunstancias de nuestra vida. Recordemos que Él es nuestro defensor y protector, y que en Él encontramos esperanza y consuelo. Amén.

Salmo 35 De La Biblia Católica.