Salmo 36 Reina Valera: Experimentando el amor y la fidelidad de Dios
Salmo 36 Reina Valera: “La iniquidad del impío me dice al corazón: No hay temor de Dios delante de sus ojos” (Salmo 36:1).
Queridos hermanos y hermanas en Cristo, hoy quiero compartir con ustedes un pasaje de la Palabra de Dios que nos habla sobre el amor y la fidelidad de nuestro Señor. El Salmo 36 Reina Valera nos muestra la realidad de vivir en medio de un mundo lleno de maldad y pecado, pero también nos enseña que en Dios encontramos refugio y protección.
El salmista comienza describiendo la maldad y la iniquidad que hay en el corazón del impío. Nos habla de aquellos que no conocen a Dios y viven sin temor ni reverencia hacia Él. Sin embargo, en contraste con la maldad humana, el salmista nos muestra la grandeza y la fidelidad de nuestro Dios.
En el versículo 5 del Salmo 36 Reina Valera, leemos: “Tu misericordia, oh Jehová, llega hasta los cielos, y tu fidelidad alcanza hasta las nubes”. Qué hermosa declaración de la grandeza de nuestro Dios. Su amor y su fidelidad son infinitos, no hay límites para su misericordia. Podemos confiar plenamente en Él, sabiendo que nunca nos abandonará.
El salmista continúa describiendo las maravillas de Dios. En el versículo 7, leemos: “¡Cuán preciosa, oh Dios, es tu misericordia! Por eso los hijos de los hombres se amparan bajo la sombra de tus alas”. Dios nos protege y nos guarda como el águila protege a sus polluelos bajo sus alas. Él es nuestro refugio seguro en medio de las tormentas de la vida. No importa cuán difíciles sean las circunstancias que enfrentemos, podemos confiar en que Dios nos sostendrá y nos dará la fuerza para seguir adelante.
El salmista también nos habla del deleite que encontramos en la presencia de Dios. En el versículo 8, leemos: “Serán saciados de la grosura de tu casa, y tú los abrevarás del torrente de tus delicias”. Dios nos invita a disfrutar de Su presencia, a encontrar plenitud y satisfacción en Él. En Su presencia encontramos paz, gozo y descanso para nuestras almas.
Además, en el Salmo 36 Reina Valera, el salmista nos recuerda la importancia de vivir en rectitud y justicia. En el versículo 9, leemos: “Porque contigo está el manantial de la vida; en tu luz veremos la luz”. Solo en Dios encontramos verdadera vida y luz. Cuando vivimos de acuerdo a Su voluntad y buscamos Su guía, experimentamos la plenitud y el propósito que Él ha diseñado para nosotros.
Queridos hermanos y hermanas, el Salmo 36 Reina Valera nos invita a confiar en el amor y la fidelidad de nuestro Dios. A pesar de las dificultades y las pruebas que enfrentemos, podemos descansar en la certeza de que Dios está con nosotros. Él nos protege, nos sustenta y nos guía en todo momento.
Así que, cuando te sientas abrumado por los desafíos de la vida, recuerda el Salmo 36 Reina Valera. Medita en las palabras del salmista y confía en la bondad y el amor de nuestro Dios. Él está dispuesto a recibirte, a protegerte y a mostrarte Su camino.
No importa cuán oscuro parezca el panorama, Dios siempre está dispuesto a derramar Su luz sobre ti. No importa cuán lejos te hayas alejado, Él siempre está dispuesto a perdonar y a restaurarte. No importa cuán abrumado te sientas, Él siempre está dispuesto a sostenerte y a darte la fuerza que necesitas.
Así que, hermanos y hermanas, abramos nuestros corazones a la Palabra de Dios y permitamos que el Salmo 36 Reina Valera nos inspire y nos fortalezca en nuestra caminata con Cristo. Que podamos experimentar Su amor y fidelidad en cada aspecto de nuestras vidas.
Que el Salmo 36 Reina Valera sea una guía constante para nosotros, recordándonos que en Dios encontramos refugio y protección. Confía en Él y experimenta Su amor y fidelidad hoy mismo.
Salmo 36 Reina Valera: “¡Cuán preciosa, oh Dios, es tu misericordia! Por eso los hijos de los hombres se amparan bajo la sombra de tus alas” (Salmo 36:7).
Salmo 36 Reina Valera: “Porque contigo está el manantial de la vida; en tu luz veremos la luz” (Salmo 36:9).