Salmo 46:9 – «Venid, ved las obras de Jehová, que ha puesto asolamientos en la tierra.»
Queridos hermanos y hermanas en Cristo, hoy quiero compartir con ustedes un pasaje de la Palabra de Dios que nos llena de esperanza y fortaleza. En el Salmo 46:9, el salmista nos invita a observar las obras de Jehová, quien ha puesto asolamientos en la tierra. Este versículo nos recuerda que Dios es el soberano sobre todas las cosas y tiene el poder de intervenir en medio de la adversidad.
En estos tiempos difíciles que estamos viviendo, es fundamental recordar que Dios está en control. Aunque el mundo pueda parecer caótico y lleno de desastres, debemos levantar nuestros ojos hacia el Señor y confiar en que Él tiene un plan perfecto en medio de la calamidad. No importa cuán grande sea la dificultad que enfrentemos, Dios siempre estará ahí para ayudarnos y guiarnos.
Cuando leemos este versículo, podemos interpretar los «asolamientos en la tierra» de diferentes maneras. Podemos pensar en las catástrofes naturales, las guerras, las enfermedades y todas las situaciones desalentadoras que vemos a nuestro alrededor. Sin embargo, también podemos aplicar esto a nuestras propias vidas. Todos enfrentamos momentos de desolación y desesperanza, momentos en los que parece que todo está perdido. Pero es en esos momentos donde debemos recordar que Dios está presente y puede transformar cualquier situación.
Nuestro Dios es un Dios de salvación y restauración. Él tiene el poder de levantar lo que está caído y sanar lo que está herido. Cuando enfrentamos adversidades, podemos confiar en que Dios está obrando en nuestro favor. Él puede tomar lo que parece un desastre y convertirlo en una bendición. No importa cuán oscuro sea nuestro camino, Él siempre estará a nuestro lado, guiándonos hacia la luz.
Cuando observamos las obras de Jehová, no solo vemos su poder y su amor, sino también su fidelidad. A lo largo de la historia, Dios ha intervenido en la vida de su pueblo una y otra vez. Él ha librado a los cautivos, ha sanado a los enfermos y ha levantado a los caídos. Podemos confiar en que Él seguirá haciendo lo mismo en nuestras vidas hoy en día.
Como ministros de Jesucristo, tenemos la responsabilidad de compartir esta verdad con aquellos que nos rodean. Debemos ser testigos vivientes de las obras de Jehová en nuestras propias vidas, para que otros puedan ver y creer en su poder transformador. No debemos tener miedo de enfrentar las dificultades, sino más bien debemos confiar en que Dios nos ha equipado con su Espíritu Santo para superar cualquier obstáculo.
En conclusión, el Salmo 46:9 nos recuerda que debemos venir y ver las obras de Jehová. Debemos observar y reconocer su poder y fidelidad en medio de los asolamientos de este mundo. Nuestro Dios es el gobernante supremo sobre todas las cosas y tiene el poder de intervenir y transformar cualquier situación. No importa cuán grande sea la adversidad que enfrentemos, podemos confiar en que Dios está con nosotros y nos guiará hacia la victoria. Que este versículo sea un recordatorio constante de la grandeza y el amor de nuestro Dios en nuestras vidas.
Salmo 46:9 – «Venid, ved las obras de Jehová, que ha puesto asolamientos en la tierra.»
En el nombre de Jesús, amén.
Salmo 46:9 – «Venid, ved las obras de Jehová, que ha puesto asolamientos en la tierra.»