Salmo 91.11 – La Promesa de la Protección Divina
Queridos hermanos y hermanas en Cristo, hoy quiero compartir con ustedes la maravillosa promesa de protección que encontramos en el Salmo 91.11. Este versículo nos recuerda el amor y cuidado constante que Dios tiene por nosotros, sus hijos amados. Permítanme sumergirnos en las profundas aguas de este salmo y descubrir juntos la verdadera magnitud de su significado.
En el Salmo 91, el salmista nos habla de la seguridad que encontramos en la presencia de Dios. Nos muestra cómo, al refugiarnos bajo las alas del Altísimo, somos protegidos de todo mal. Es en este contexto que encontramos la poderosa afirmación de nuestro versículo clave: «Pues a sus ángeles mandará acerca de ti, que te guarden en todos tus caminos» (Salmo 91.11, RV).
Cuando leemos estas palabras, nos damos cuenta de que no estamos solos en nuestro caminar diario. Dios ha enviado a sus ángeles para que nos protejan y cuiden en todos nuestros caminos. Nuestro Padre celestial, en su amor y misericordia, ha provisto una compañía celestial para velar por nosotros en cada paso que damos.
En medio de un mundo lleno de peligros y dificultades, es reconfortante saber que no estamos desamparados. Podemos confiar en que Dios tiene su mirada puesta en nosotros y que sus ángeles están a nuestro alrededor, dispuestos a intervenir en nuestro favor. No importa qué desafíos enfrentemos, podemos aferrarnos a la promesa de que la mano de Dios nos guiará y protegerá.
Esta promesa de protección divina no significa que estaremos libres de todo sufrimiento o que no enfrentaremos pruebas en nuestra vida. Sin embargo, nos asegura que, a pesar de las circunstancias difíciles, Dios está con nosotros y nos sostendrá en su amoroso abrazo. Podemos tener la certeza de que no importa lo que suceda, su presencia nos acompañará y su poder nos sostendrá.
Queridos hermanos y hermanas, hay momentos en los que nos sentimos vulnerables y temerosos ante lo desconocido. Sin embargo, el Salmo 91.11 nos recuerda que no estamos solos en nuestras luchas. Dios ha enviado a sus ángeles para cuidar de nosotros y protegernos en cada paso que damos. No importa cuán oscuro sea el valle por el que caminamos, no debemos temer, porque su presencia nos rodea y nos guarda.
En este tiempo de incertidumbre y desafíos, es esencial recordar las palabras del Salmo 91.11. Debemos aferrarnos a la promesa de que Dios nos guarda en todos nuestros caminos. Él es nuestro refugio y fortaleza, nuestro amparo en tiempos de angustia. Podemos confiar en que su amor y cuidado nos acompañarán siempre.
Hermanos y hermanas, que estas palabras les sirvan de aliento y fortaleza en su caminar con Cristo. Que el Salmo 91.11 resuene en sus corazones, recordándoles que Dios ha enviado a sus ángeles para cuidar de ustedes. No teman, confíen en su protección y descansen en su amor eterno.
En conclusión, la promesa de protección divina encontrada en el Salmo 91.11 es un recordatorio constante del amor y cuidado que Dios tiene por nosotros. En medio de los desafíos y dificultades de la vida, podemos confiar en que sus ángeles están a nuestro lado, velando por nosotros en cada paso que damos. No importa cuán oscuro sea el camino, su presencia nos rodea y su poder nos sostiene. Que este versículo sea una fuente de fortaleza y esperanza en su vida diaria.
«Porque a sus ángeles mandará acerca de ti, que te guarden en todos tus caminos» (Salmo 91.11, RV).
Que la bendición del Señor esté sobre ustedes siempre. Amén.