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Salmo 91 Reina Valera 1960 Hablado: La Protección Divina en tus Oídos


Salmo 91 Reina Valera 1960 Hablado: El Refugio del Altísimo

Saludos, amados hermanos y hermanas en Cristo. Hoy nos reunimos para reflexionar sobre el poder, la protección y el amor incondicional que nuestro Dios nos ofrece a través del Salmo 91 Reina Valera 1960 Hablado. Este hermoso salmo nos recuerda que, sin importar las dificultades que enfrentemos en esta vida, siempre podemos encontrar refugio en los brazos del Altísimo.

El Salmo 91 comienza diciendo: “El que habita al abrigo del Altísimo morará bajo la sombra del Omnipotente” (Salmo 91:1). Este versículo nos muestra que nuestra relación con Dios es fundamental para experimentar su protección y cuidado. Si buscamos refugio en él, si hacemos de su presencia nuestra morada, entonces podremos descansar en su sombra y encontrar paz en medio de las tormentas de la vida.

En el versículo 2, el salmista continúa diciendo: “Diré yo a Jehová: Esperanza mía, y castillo mío; mi Dios, en quien confiaré”. Qué hermoso es saber que tenemos un Dios en quien confiar plenamente. Él es nuestro refugio seguro, nuestra fortaleza inexpugnable. En momentos de incertidumbre, podemos acudir a él con esperanza, sabiendo que él nos sostendrá y protegerá.

El Salmo 91 también nos asegura que Dios enviará a sus ángeles para protegernos en todo momento. Dice así: “Pues a sus ángeles mandará acerca de ti, que te guarden en todos tus caminos” (Salmo 91:11). Esta promesa nos recuerda que no estamos solos en nuestras batallas. Dios ha enviado a sus ángeles para que nos cuiden y nos guíen en cada paso que damos. Qué maravilloso es saber que contamos con la protección celestial en todo momento.

Queridos hermanos y hermanas, el Salmo 91 Reina Valera 1960 Hablado nos invita a confiar plenamente en Dios, a buscar refugio en él y a descansar bajo su sombra. En medio de las dificultades y los desafíos de la vida, no estamos desamparados. Tenemos un Padre amoroso que nos cuida y nos protege. Él es nuestro refugio seguro, nuestra fortaleza inexpugnable.

El salmo concluye con estas palabras poderosas: “Por cuanto en mí ha puesto su amor, yo también lo libraré; le pondré en alto, por cuanto ha conocido mi nombre” (Salmo 91:14). Estas palabras nos recuerdan que Dios nos ama incondicionalmente y que está dispuesto a liberarnos de cualquier peligro. Él nos exalta y nos eleva, porque hemos confiado en su nombre y conocemos su poder.

Hermanos y hermanas, que el mensaje del Salmo 91 Reina Valera 1960 Hablado resuene en nuestros corazones hoy y siempre. Que en medio de las dificultades, nos refugiemos en el Altísimo y encontremos paz en su sombra. Que confiemos plenamente en él, sabiendo que sus ángeles nos protegen y que él nos ama incondicionalmente.

En conclusión, el Salmo 91 Reina Valera 1960 Hablado es un recordatorio de la protección y el amor incondicional que Dios nos ofrece. Nos anima a confiar en él, a buscar refugio en sus brazos y a descansar bajo su sombra. Que este salmo sea una fuente de inspiración y fortaleza en nuestras vidas. Recuerden siempre: “El que habita al abrigo del Altísimo morará bajo la sombra del Omnipotente”.

Salmo 91 Reina Valera 1960 Hablado.