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Salmos 23:1-4: El refugio divino que fortalece


Salmos 23:1-4 Reina Valera

1 Jehová es mi pastor; nada me faltará.
2 En lugares de delicados pastos me hará descansar;
Junto a aguas de reposo me pastoreará.
3 Confortará mi alma;
Me guiará por sendas de justicia por amor de su nombre.
4 Aunque ande en valle de sombra de muerte,
No temeré mal alguno, porque tú estarás conmigo;
Tu vara y tu cayado me infundirán aliento.

H2: Salmos 23:1-4 – La Guía y Protección de nuestro Pastor

Queridos hermanos y hermanas en Cristo,

Hoy nos encontramos reunidos para reflexionar sobre uno de los pasajes más conocidos y amados de la Biblia, Salmos 23:1-4. Estas palabras nos revelan la guía y protección que nuestro fiel Pastor, Jehová, nos brinda en cada etapa de nuestras vidas. Permítanme llevarlos por un camino de inspiración y esperanza a través de estas poderosas palabras.

En el versículo 1, el salmista proclama con certeza: «Jehová es mi pastor; nada me faltará». Estas palabras nos enseñan que nuestro Dios es el cuidador supremo de nuestras vidas. Como ovejas confiadas en su pastor, podemos tener la seguridad de que Él suplirá todas nuestras necesidades. No importa cuál sea nuestra situación, podemos descansar en la certeza de que Dios está con nosotros y nos proveerá con abundancia.

El versículo 2 nos habla de los lugares de delicados pastos y aguas de reposo. Imaginen un prado verde y frondoso, donde nuestras almas pueden encontrar descanso y paz. Nuestro Pastor nos conduce hacia estos lugares, donde podemos ser restaurados y renovados. Él nos provee con todo lo que necesitamos para nuestra vida espiritual, emocional y física. En esos momentos de quietud y paz, podemos sentir la presencia amorosa de nuestro Dios.

La siguiente promesa se encuentra en el versículo 3: «Confortará mi alma; me guiará por sendas de justicia por amor de su nombre». Queridos hermanos y hermanas, nuestro Dios no solo provee para nuestras necesidades materiales, sino que también se preocupa profundamente por nuestro bienestar emocional y espiritual. Él nos consuela en tiempos de tristeza y nos guía por el camino de la justicia, para que podamos vivir una vida plena y significativa en su nombre. Sigamos confiando en su guía y permitamos que Él nos conduzca hacia una vida de rectitud y amor.

Finalmente, en el versículo 4, encontramos una de las promesas más poderosas de este pasaje: «Aunque ande en valle de sombra de muerte, no temeré mal alguno, porque tú estarás conmigo; tu vara y tu cayado me infundirán aliento». En momentos de oscuridad y dificultad, nuestro Pastor nunca nos abandona. Él camina a nuestro lado en los valles más oscuros y peligrosos. No importa cuán amenazante sea la situación, no debemos temer, porque Dios está con nosotros. Su vara y su cayado, símbolos de su autoridad y protección, nos infunden aliento y nos aseguran que siempre estaremos seguros bajo su cuidado.

Hermanos y hermanas, Salmos 23:1-4 nos recuerda que tenemos un Dios amoroso que nos guía, protege y provee en todo momento. Podemos descansar en su amor y confiar en su fidelidad. Invoquemos su presencia en nuestras vidas, permitiendo que Él nos conduzca por los caminos de justicia y nos fortalezca en los momentos de dificultad. Que estas palabras sagradas llenen nuestros corazones de esperanza y nos inspiren a vivir una vida plena en la presencia de nuestro Pastor.

Recuerden siempre estas palabras: «Jehová es mi pastor; nada me faltará». Que esta verdad sea un faro de luz en medio de la oscuridad y una fuente inagotable de paz y consuelo. Confíen en el Señor y permitan que Él los guíe en su camino.

Que la gracia y el amor de nuestro Dios estén con todos ustedes.

Salmos 23:1-4 Reina Valera

1 Jehová es mi pastor; nada me faltará.
2 En lugares de delicados pastos me hará descansar;
Junto a aguas de reposo me pastoreará.
3 Confortará mi alma;
Me guiará por sendas de justicia por amor de su nombre.
4 Aunque ande en valle de sombra de muerte,
No temeré mal alguno, porque tú estarás conmigo;
Tu vara y tu cayado me infundirán aliento.

Salmos 23:1-4 Reina Valera