Conéctate Con Dios

Salmos 34 Reina Valera: Un cántico de alabanza y protección divina


Salmos 34 Reina Valera: Descubriendo la bondad de Dios en medio de la adversidad

Salmos 34 Reina Valera

Salmos 34 Reina Valera

Estimados hermanos y hermanas en Cristo,

Hoy quiero compartir con ustedes un pasaje de la Palabra de Dios que ha sido una fuente inagotable de consuelo y fortaleza para mí en momentos de adversidad. Se trata del Salmo 34 de la Reina Valera, un salmo que nos invita a confiar en la bondad y la fidelidad de nuestro Dios en todo momento.

En el Salmo 34, el salmista, que es el rey David, nos habla de su experiencia personal con Dios. Él proclama con gozo: “Bendeciré a Jehová en todo tiempo; su alabanza estará de continuo en mi boca” (Salmos 34:1). Estas palabras son un recordatorio de que debemos adorar y alabar a Dios en todo momento, incluso en medio de las pruebas y dificultades.

En el versículo 4, el salmista nos dice: “Busqué a Jehová, y él me oyó, y me libró de todos mis temores”. ¡Qué promesa tan maravillosa! Cuando buscamos a Dios con todo nuestro corazón, Él nos escucha y nos libra de nuestros temores. No importa cuán grande sea el problema que enfrentemos, nuestro Dios es más grande y poderoso.

A lo largo del Salmo 34, el salmista nos anima a confiar en Dios y a buscar refugio en Él. Nos dice: “Prueba y ve que Jehová es bueno; dichoso el hombre que confía en él” (Salmos 34:8). Nuestro Dios es bueno y siempre está dispuesto a ayudarnos y guiarnos en medio de las dificultades. Si confiamos en Él, seremos bendecidos y experimentaremos su bondad en nuestras vidas.

Además, el Salmo 34 nos enseña la importancia de vivir una vida recta y justa delante de Dios. El salmista declara: “Aparta de mal tu lengua, y tus labios de hablar engaño. Apártate del mal y haz el bien; busca la paz y síguela” (Salmos 34:13-14). Nuestro testimonio como cristianos debe reflejar la bondad y la justicia de Dios. Debemos evitar la maldad y buscar la paz en todas nuestras relaciones y acciones.

En el versículo 17, el salmista nos recuerda que el Señor está cerca de los quebrantados de corazón y salva a los contritos de espíritu. Cuando estamos heridos, tristes o desanimados, Dios está cerca de nosotros para consolarnos y sanarnos. Él no solo nos rescata de nuestras aflicciones, sino que también restaura nuestra esperanza y nos da fuerzas para seguir adelante.

Quiero alentarlos a que tomen tiempo para meditar en el Salmo 34 y permitan que sus palabras penetren en lo más profundo de su ser. Permítanle a Dios hablarles a través de este pasaje y recordarles su amor incondicional y su fidelidad en todo momento.

Nuestro Dios es digno de toda alabanza y adoración, incluso en medio de las pruebas y tribulaciones. Él es nuestra fortaleza y nuestro refugio en tiempos de dificultad. Que este Salmo 34 sea una fuente de inspiración y consuelo para cada uno de nosotros mientras caminamos en fe y confianza en nuestro amado Salvador.

Recuerden estas palabras del Salmo 34: “Bendeciré a Jehová en todo tiempo; su alabanza estará de continuo en mi boca” (Salmos 34:1). Esta es una invitación para vivir en gratitud y adoración constante al Señor, confiando en su bondad y fidelidad.

Que Dios les bendiga abundantemente, queridos hermanos y hermanas en Cristo.

Salmos 34 Reina Valera