Salmos 91:1-16 – El Refugio Seguro bajo la Protección de Dios
¡Queridos hermanos y hermanas en Cristo! Hoy les traigo un mensaje de esperanza y fortaleza, basado en el maravilloso Salmo 91:1-16. En este pasaje bíblico, encontramos una promesa de seguridad y protección bajo el amparo de nuestro amado Señor.
El Salmo 91 comienza con estas hermosas palabras: «El que habita al abrigo del Altísimo morará bajo la sombra del Omnipotente» (Salmos 91:1). Aquí se nos revela el secreto para encontrar refugio en tiempos de adversidad. Cuando nos refugiamos en Dios, somos cubiertos por Su poderosa sombra protectora. No importa cuán fuerte sea la tormenta que enfrentamos, podemos tener la certeza de que Él estará a nuestro lado.
El Salmo continúa diciendo: «Diré yo a Jehová: Esperanza mía, y castillo mío; mi Dios, en quien confiaré» (Salmos 91:2). Qué hermoso es poder afirmar con confianza que nuestro Dios es nuestra esperanza y nuestro castillo. Él es nuestro refugio seguro en momentos de angustia y desesperación. Cuando ponemos nuestra confianza en Él, podemos estar seguros de que Él nos sostendrá y nos protegerá.
Amados hermanos, el Salmo 91 nos revela una serie de promesas maravillosas que Dios tiene reservadas para aquellos que le aman y le buscan. Nos dice: «No temerás el terror nocturno, ni saeta que vuele de día, ni pestilencia que ande en oscuridad, ni mortandad que en medio del día destruya» (Salmos 91:5-6). Estas palabras son un recordatorio de que no importa cuál sea la situación que enfrentemos, Dios está con nosotros y nos guarda de todo mal.
Además, el Salmo 91 nos asegura que «caerán a tu lado mil, y diez mil a tu diestra; mas a ti no llegará» (Salmos 91:7). No importa cuán grandes sean los peligros que nos rodeen, podemos descansar en la certeza de que Dios nos mantendrá a salvo. Su protección es infalible y Su amor por nosotros es inmutable.
En medio de las dificultades y los desafíos de la vida, es natural que sintamos temor y ansiedad. Pero el Salmo 91 nos recuerda: «Porque a sus ángeles mandará acerca de ti, que te guarden en todos tus caminos» (Salmos 91:11). Nuestro Dios envía a sus ángeles para que nos protejan y nos cuiden en cada paso que damos. No estamos solos en esta batalla, pues contamos con una poderosa comitiva celestial que vela por nuestra seguridad.
Queridos hermanos, el Salmo 91 culmina con una promesa que nos llena de gozo y esperanza: «Vida larga yo le daré, y le mostraré mi salvación» (Salmos 91:16). Dios nos asegura que aquellos que confían en Él y se refugian bajo Su sombra recibirán vida abundante y serán testigos de Su salvación. Él nos invita a vivir una vida plena en Su presencia, disfrutando de Su amor y experimentando Su poder en cada aspecto de nuestra existencia.
En conclusión, el Salmo 91:1-16 es un recordatorio poderoso de que nuestro Dios es un refugio seguro en todo momento. Cuando nos refugiamos en Él, encontramos protección, fortaleza y consuelo. No importa cuán grandes sean los desafíos que enfrentemos, podemos confiar en que Dios está a nuestro lado, guardándonos de todo mal. Que estas palabras resuenen en nuestros corazones y nos inspiren a buscar refugio en el Altísimo, sabiendo que Su amor y protección son eternos.
Que el Salmo 91:1-16 sea nuestro refugio y fortaleza en cada día de nuestras vidas. Que nos afiancemos en la certeza de que bajo la sombra del Omnipotente encontraremos paz y seguridad. ¡Amén!
Salmos 91:1-16 – El Refugio Seguro bajo la Protección de Dios
Salmos 91:1 – «El que habita al abrigo del Altísimo morará bajo la sombra del Omnipotente.»
Salmos 91:16 – «Vida larga yo le daré, y le mostraré mi salvación.»
Salmos 91:1 – «El que habita al abrigo del Altísimo morará bajo la sombra del Omnipotente.»