Salmo 126:2 – “Entonces nuestra boca se llenó de risa, y nuestra lengua de alabanza; entonces decían entre las naciones: Grandes cosas ha hecho Jehová con estos.”
Queridos hermanos y hermanas en Cristo,
Hoy quiero compartir con ustedes un salmo que, sin duda, nos inspira y llena de esperanza. El Salmo 126:2 nos recuerda que en medio de nuestras pruebas y dificultades, Dios tiene el poder de transformar nuestras lágrimas en risas y nuestra tristeza en gozo. Nos insta a alabar al Señor y a reconocer las grandes cosas que Él ha hecho por nosotros.
La vida está llena de altibajos. Todos enfrentamos desafíos, pruebas y momentos de angustia. Sin embargo, en medio de esas situaciones difíciles, podemos encontrar consuelo y fortaleza en la Palabra de Dios. El Salmo 126:2 nos recuerda que Dios tiene el poder de cambiar nuestra realidad. Él puede tomar nuestras situaciones más desesperadas y convertirlas en testimonios de Su amor y fidelidad.
Cuando enfrentamos tiempos difíciles, es natural sentir tristeza y preocupación. Pero este versículo nos anima a no quedarnos estancados en la tristeza, sino a levantar nuestra voz en alabanza y gratitud a nuestro Dios. Incluso en medio de la adversidad, Dios merece nuestra adoración. Su amor y poder son más grandes que cualquier problema que enfrentemos.
Imagínense, hermanos y hermanas, cómo sería nuestra vida si siempre reconociéramos las grandes cosas que Dios ha hecho por nosotros. Si nos enfocáramos en Sus bendiciones y en Su fidelidad en lugar de nuestras dificultades, nuestras vidas estarían llenas de gozo y gratitud. Las personas a nuestro alrededor también serían testigos del poder de Dios en nuestras vidas y podrían decir, al igual que en el Salmo 126:2, “Grandes cosas ha hecho Jehová con estos”.
No importa cuán grandes sean los desafíos que enfrentemos, podemos confiar en que Dios está obrando en nuestras vidas. Él es un Dios de milagros y siempre tiene un plan para nosotros. A veces, Su respuesta puede tomar tiempo, pero nunca debemos perder la esperanza ni dejar de alabarle. Dios es fiel y cumplirá Sus promesas en el momento perfecto.
Hermanos y hermanas, en este momento, los invito a reflexionar sobre las grandes cosas que Dios ha hecho en sus vidas. Piensen en las bendiciones que han recibido, en las veces que Dios les ha rescatado y en los momentos en que han experimentado Su amor y gracia. Permítanme recordarles nuevamente el Salmo 126:2: “Entonces nuestra boca se llenó de risa, y nuestra lengua de alabanza; entonces decían entre las naciones: Grandes cosas ha hecho Jehová con estos”.
No importa cuál sea su situación actual, no pierdan de vista las grandes cosas que Dios ha hecho por ustedes. Levanten sus corazones en alabanza y gratitud, y confíen en que Él continuará obrando en sus vidas. Nunca olviden que Dios es capaz de transformar sus lágrimas en risas y sus pruebas en testimonios de Su amor y poder.
En conclusión, hermanos y hermanas, recordemos siempre el Salmo 126:2 y permitamos que llegue a lo más profundo de nuestros corazones. Dios está obrando en nuestras vidas, y nuestras bocas deben estar llenas de risa y nuestras lenguas de alabanza. ¡Grandes cosas ha hecho Jehová con nosotros! Que nuestras vidas sean un testimonio vivo de Su amor y fidelidad.
Salmo 126:2 – “Entonces nuestra boca se llenó de risa, y nuestra lengua de alabanza; entonces decían entre las naciones: Grandes cosas ha hecho Jehová con estos”.