TU ALABANZA ESTARÁ DE CONTINUO EN MI BOCA
Introducción:
Hermanos y hermanas en Cristo, hoy quiero compartir con ustedes una hermosa verdad que se encuentra en la Palabra de Dios. El salmista nos enseña en el Salmo 34:1: «Bendeciré a Jehová en todo tiempo; su alabanza estará de continuo en mi boca.» Esta declaración poderosa nos invita a reflexionar sobre la importancia de tener la alabanza siempre presente en nuestras vidas.
La importancia de la alabanza:
La alabanza es un acto de adoración y gratitud hacia nuestro Dios. Cuando alabamos a Dios, reconocemos su grandeza, su bondad y su poder en nuestras vidas. No importa cuáles sean las circunstancias que enfrentemos, la alabanza nos permite enfocar nuestros ojos en Aquel que es digno de todo honor y gloria.
La alabanza como estilo de vida:
Hermanos y hermanas, la alabanza no debe ser simplemente una canción que cantamos en el culto dominical. La alabanza debe ser un estilo de vida. Nuestro Dios es digno de alabanza en todo tiempo y en toda circunstancia. Cuando enfrentamos pruebas y dificultades, podemos alabar a Dios por su fidelidad. Cuando experimentamos gozo y bendiciones, podemos alabar a Dios por su bondad. Nuestra alabanza no debe depender de nuestras circunstancias, sino de la grandeza de nuestro Dios.
La alabanza como testimonio:
Cuando nuestra alabanza está de continuo en nuestra boca, estamos dando testimonio del poder y la gracia de Dios en nuestras vidas. Nuestro testimonio puede impactar las vidas de aquellos que nos rodean y llevarlos a conocer a Jesús. En Filipenses 2:14-15, el apóstol Pablo nos exhorta diciendo: «Haced todo sin murmuraciones y contiendas, para que seáis irreprensibles y sencillos, hijos de Dios sin mancha en medio de una generación maligna y perversa, en medio de la cual resplandecéis como luminares en el mundo.»
Cuando nuestra alabanza está de continuo en nuestra boca, estamos siendo luz en medio de la oscuridad. Estamos mostrando al mundo que nuestro Dios es real y que su amor y poder pueden transformar vidas. Nuestra alabanza es un testimonio vivo de la obra de Dios en nosotros.
La alabanza como arma espiritual:
Hermanos y hermanas, la alabanza también es un arma espiritual poderosa. En 2 Crónicas 20:21-22 leemos: «Y habiendo consultado con el pueblo, ordenó cantores para Jehová, y que alabasen a Dios con voces de júbilo y loor, vestidos de ornamentos sagrados. Y cuando comenzaron a entonar cantos de alabanza, Jehová puso contra los hijos de Amón, de Moab y del monte de Seir, las emboscadas de ellos mismos que venían contra Judá; y se mataron los unos a los otros.»
Cuando enfrentamos batallas y luchas espirituales, podemos utilizar la alabanza como un arma para derrotar al enemigo. La alabanza desata el poder sobrenatural de Dios en nuestras vidas y nos fortalece en nuestra fe. No importa cuán grandes sean los obstáculos que enfrentemos, cuando nuestra alabanza está de continuo en nuestra boca, estamos declarando la victoria de Cristo sobre toda situación.
Conclusión:
Hermanos y hermanas, recordemos siempre las palabras del salmista en el Salmo 34:1: «Bendeciré a Jehová en todo tiempo; su alabanza estará de continuo en mi boca.» Que estas palabras se conviertan en nuestra guía y motivación para vivir una vida de alabanza constante. Que nuestra alabanza sea un testimonio vivo de la obra de Dios en nuestras vidas. Que nuestra alabanza sea un arma poderosa que nos lleve a la victoria en Cristo.
Que tu alabanza esté de continuo en tu boca, querido hermano y hermana en Cristo. Que la alabanza sea el lenguaje de tu corazón y la melodía de tu vida. Que en todo tiempo y en toda circunstancia, puedas declarar la grandeza de nuestro Dios. ¡Bendito sea Jehová, nuestro Salvador y Redentor!
Tu Alabanza Estará De Continuo En Mi Boca.