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Venganza divina: Salmos 7:11 revela la justicia celestial


Salmos 7:11: «Dios es juez justo, y Dios está airado contra el impío todos los días.»

Queridos hermanos y hermanas en Cristo, hoy quiero compartir con ustedes una verdad poderosa que se encuentra en el libro de los Salmos, específicamente en el Salmo 7:11. Este versículo nos recuerda que Dios es un juez justo y que está airado contra los impíos todos los días. Esta es una afirmación que puede resultar desafiante para algunos, pero también es un recordatorio de la justicia divina y del amor de Dios hacia aquellos que le siguen.

En nuestra vida cotidiana, a menudo nos encontramos con situaciones injustas. Vemos cómo los malvados prosperan y cómo los justos sufren. A veces nos preguntamos por qué Dios permite esto, por qué no interviene y pone fin a la maldad que nos rodea. Pero este versículo nos muestra que Dios no está indiferente ante la injusticia.

Dios es un juez justo y su ira se despierta contra los impíos. Esto no significa que Dios sea un ser vengativo o cruel, sino que su justicia es perfecta y su amor por la verdad y la justicia es inquebrantable. Él ve cada acto de maldad y tiene el poder para ponerle fin en su tiempo perfecto.

Como cristianos, debemos encontrar consuelo en el hecho de que Dios es el juez supremo y que ningún acto injusto quedará impune. Aunque a veces parezca que los malvados triunfan, debemos confiar en que Dios tiene el control y que su justicia prevalecerá. Nuestro papel es confiar en él y vivir vidas justas y piadosas, sin ser arrastrados por la maldad que nos rodea.

Además, este versículo también nos llama a reflexionar sobre nuestra propia vida. ¿Estamos viviendo de acuerdo con la voluntad de Dios? ¿Estamos siguiendo sus mandamientos y buscando la justicia en todas nuestras acciones? Es fácil señalar con el dedo a los impíos, pero a menudo olvidamos examinarnos a nosotros mismos.

La justicia de Dios nos invita a vivir vidas rectas y a buscar la verdad en todo lo que hacemos. Nos llama a amar a nuestros prójimos y a tratar a los demás con justicia y misericordia. Nos insta a ser luz en medio de la oscuridad y a no permitir que la maldad nos corrompa.

Queridos hermanos y hermanas, recordemos siempre que Dios es un juez justo y que su ira se despierta contra los impíos todos los días. Confíemos en su justicia y busquemos vivir vidas piadosas y justas. No permitamos que la injusticia nos desanime o nos corrompa. En lugar de eso, clamemos a Dios por su ayuda y permitamos que su amor y su justicia nos guíen en todo lo que hacemos.

En conclusión, el Salmo 7:11 nos recuerda la justicia divina y el amor de Dios hacia aquellos que le siguen. Es un recordatorio de que Dios no está indiferente ante la injusticia y que su ira se despierta contra los impíos. Confíemos en su justicia y busquemos vivir vidas piadosas y justas. Que este versículo nos inspire a ser luz en medio de la oscuridad y a buscar la verdad en todo lo que hacemos. Amén.

Salmos 7:11: «Dios es juez justo, y Dios está airado contra el impío todos los días.»

Salmos 7:11: «Dios es juez justo, y Dios está airado contra el impío todos los días.»