Versículo para abrir servicio: “Porque donde están dos o tres congregados en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos.” – Mateo 18:20 (RVR 1960)
¡Queridos hermanos y hermanas en Cristo!
Es un privilegio estar aquí reunidos hoy, congregados en el nombre de nuestro Señor Jesucristo. Como cristianos, sabemos que nuestra fe nos une y nos fortalece. En este momento de adoración y servicio, recordemos el versículo para abrir servicio que nos dice que donde dos o tres se reúnen en el nombre de Cristo, Él está presente en medio de nosotros.
En nuestra vida cotidiana, a menudo nos enfrentamos a desafíos y dificultades. Podemos sentirnos solos y desanimados en medio de las luchas diarias. Pero cuando nos reunimos como comunidad de creyentes, tenemos la oportunidad de experimentar la presencia poderosa de nuestro Salvador.
Al abrir este servicio, recordemos que no estamos solos en nuestra búsqueda espiritual. Jesucristo está presente en nuestras vidas y en nuestras reuniones. Él nos guía, nos consuela y nos da fuerzas para enfrentar cualquier obstáculo que se presente en nuestro camino.
En este momento, deseamos enfocarnos en la importancia de la unidad en la iglesia. El versículo para abrir servicio nos recuerda que cuando nos congregamos en el nombre de Cristo, Él está presente. Esto significa que nuestra adoración y servicio deben ser caracterizados por el amor y el compañerismo.
La unidad no significa que todos pensemos y actuemos de la misma manera. Significa que, a pesar de nuestras diferencias, nos esforzamos por mantenernos unidos en el amor de Cristo. Al hacerlo, nos convertimos en un testimonio poderoso para el mundo de lo que significa ser parte del cuerpo de Cristo.
En nuestras reuniones, debemos esforzarnos por tratar a los demás con respeto y amor. Debemos recordar que cada persona es una creación única de Dios y merece ser valorada y apreciada. Al seguir el ejemplo de Cristo, podemos aprender a perdonar, a mostrar compasión y a ser pacientes con los demás.
Al recordar el versículo para abrir servicio, debemos recordar que nuestra iglesia no es solo un edificio, sino una comunidad de creyentes. Somos llamados a ser una familia que se apoya mutuamente, que ora unos por otros y que se anima en la fe.
Al finalizar este servicio, recordemos que la presencia de Cristo está con nosotros en todo momento. Él es nuestro refugio, nuestra fortaleza y nuestro guía. No importa cuáles sean las circunstancias que enfrentemos, podemos confiar en que Él está con nosotros y que nos dará la fuerza para superar cualquier desafío.
Encomendemos nuestras vidas y nuestras reuniones a Él, sabiendo que cuando nos congregamos en Su nombre, Él está presente en medio de nosotros. Que este versículo para abrir servicio sea un recordatorio constante de la importancia de nuestra fe y de la unidad en la iglesia.
Que el amor de Cristo nos guíe, nos sostenga y nos llene de gozo mientras continuamos nuestro camino como seguidores de Jesús. Amén.
Versículo para abrir servicio: “Porque donde están dos o tres congregados en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos.” – Mateo 18:20 (RVR 1960)