Yo Y Mi Casa Serviremos A Jehová Versículo
Hermanos y hermanas en Cristo, hoy quiero hablarles sobre un versículo que ha sido un estandarte para muchos creyentes a lo largo de la historia. Este versículo es una declaración de fe y compromiso hacia nuestro Dios, Jehová. Es un llamado a vivir una vida de servicio y adoración a nuestro Creador. Este versículo es «Yo Y Mi Casa Serviremos A Jehová» (Josué 24:15).
En este versículo, el líder espiritual Josué proclama su lealtad a Dios y anima a su pueblo a hacer lo mismo. Josué sabía que la verdadera adoración y servicio a Dios debían comenzar en su propio hogar. Él entendía que si queremos ser verdaderos discípulos de Cristo, debemos primero comprometernos a servir a Dios en nuestra familia.
Hermanos y hermanas, nuestras casas son lugares sagrados donde se debe reflejar el amor y la presencia de Dios. Como padres y líderes espirituales en nuestros hogares, tenemos la responsabilidad de guiar a nuestra familia en el camino de la fe. Debemos enseñar a nuestros hijos a amar y servir a Dios, a través de nuestras palabras y acciones. Nuestra vida diaria debe ser un testimonio vivo del poder transformador de la fe en Cristo.
No debemos subestimar el impacto que podemos tener en nuestra familia. Nuestros hijos, cónyuges, padres y hermanos están observando cómo vivimos nuestra vida cristiana. Ellos están viendo cómo respondemos a los desafíos y dificultades, cómo amamos a los demás y cómo buscamos a Dios en todo momento. Nuestra vida debe ser un ejemplo de fe y obediencia a Dios.
Queridos hermanos, el versículo «Yo Y Mi Casa Serviremos A Jehová» nos desafía a tomar una posición firme en nuestra fe y compromiso con Dios. No podemos ser tibios ni comprometer nuestra adoración a Dios. Debemos estar dispuestos a renunciar a todo lo que nos aleje de Él y estar dispuestos a obedecer Su Palabra en todo momento.
Servir a Jehová implica dedicar tiempo para la oración y la lectura de la Palabra. Implica buscar Su voluntad en todas las decisiones que tomamos. Implica amar a nuestro prójimo y perdonar a aquellos que nos han hecho daño. Implica vivir una vida de integridad y honestidad. Implica adorar a Dios en espíritu y en verdad.
Queridos hermanos, no podemos servir a dos señores. No podemos comprometer nuestra fe y seguir a las tendencias del mundo. Debemos tomar una decisión firme de servir a Jehová en todas las áreas de nuestra vida. Debemos hacerlo no solo por nosotros mismos, sino también por el bienestar espiritual de nuestra familia.
En este mundo lleno de tentaciones y distracciones, es fácil perder de vista nuestra prioridad de servir a Dios. Pero recordemos las palabras de Josué, «Yo Y Mi Casa Serviremos A Jehová». Esta declaración debe ser nuestro lema, nuestro recordatorio constante de que nuestro hogar debe ser un lugar de adoración y servicio a Dios.
Que cada día, al despertar, recordemos nuestro compromiso con Dios y con nuestra familia. Que cada decisión que tomemos, cada palabra que hablemos y cada acción que realicemos esté guiada por nuestro amor y servicio a Jehová. Que nuestra vida sea un testimonio vivo de nuestra fe en Cristo.
Hermanos y hermanas, hoy les animo a renovar su compromiso con Dios y con su familia. Que «Yo Y Mi Casa Serviremos A Jehová» sea una declaración que resuene en nuestros corazones y acciones. Que nuestras casas sean lugares de amor, paz y adoración a nuestro Dios. Que nuestra vida sea un reflejo de Su gracia y amor.
Recordemos siempre que nuestro servicio a Jehová no termina en las puertas de nuestra casa, sino que debe extenderse a cada área de nuestras vidas. Que cada palabra y acción que tomemos sea una oportunidad para glorificar a Dios y mostrar Su amor al mundo.
¡Yo Y Mi Casa Serviremos A Jehová!